El ex presidente de Liberia, Charles Taylor, ha descrito cómo evadió el embargo de armas impuesto por las Naciones Unidas, desviando millones de dólares a través de una cuenta bancaria personal secreta, para comprar armas y munición, en un esfuerzo por derrotar a los rebeldes que amenazaban con deponer su gobierno.
Taylor hizo estas declaraciones cuando se retomó su juicio por crímenes de guerra, el día 15 de febrero, en La Haya, Países Bajos.
“El mayor desembolso de esta cuenta fue para armas y munición”, dijo Taylor, afirmando que la adquisición era necesaria para combatir a los rebeldes del LURD, Liberianos Unidos para la Reconciliación y el Desarrollo, ya que su país estaba bajo el embargo de la ONU.
La cuenta bancaria, abierta a su nombre en el Banco Liberiano de Desarrollo e Inversión, LBDI, en 1999, y en la que fueron depositados millones de dólares durante su tiempo como presidente, fue un gran foco de atención durante el interrogatorio de la fiscalía al ex señor de la guerra.
Los fiscales han alegado que el dinero de esta cuenta no fue utilizado para propósitos oficiales sino que le dieron a Taylor la posibilidad de desviar dinero del las arcas del estado, para enriquecerse él mismo. Taylor desmintió esta acusación durante su interrogatorio, y el día después, su equipo de defensa le dio la oportunidad de explicar la existencia de esta cuenta, durante su turno de preguntas.
Taylor dijo que el legislativo liberiano le autorizó a abrir esa cuenta secreta a su nombre, y que fue utilizada tanto para abastecimiento de armas como para propósitos que beneficiaban al gobierno de Liberia. “Esta era una cuenta encubierta abierta por el gobierno de Liberia de entonces. Tenía que ser abierta a mi nombre”, explicó Taylor.
“El mayor desembolso de esta cuenta fue para armas y municiones. De esta cuenta pagábamos los salarios a las unidades especiales, como la Unidad Anti Terrorista, los Servicios Especiales de Seguridad, y varios proyectos presidenciales relacionados con la buena voluntad en aquel tiempo”, explicó el ex presidente de Liberia.
Además, Taylor dijo a los jueces que su ex ministro de Defensa, Daniel Chea, se había equivocado cuando dijo en un programa de televisión de la cadena pública americana, PBS, durante una entrevista en mayo de 2005, que el proceso de desarme había sido un fiasco.
“Estoy totalmente en desacuerdo con el señor Chea. Todos los observadores de la ONU, ECOWAS y la Unión Africana señalaron que el desarme, aunque no fue total, de hecho ningún desarme puede ser total, era sustancialmente suficiente para llevar a cabo las elecciones”, aseguró Taylor.
En la entrevista de mayo de 2005, Chea declaró en el programa Frontline World que Taylor había decepcionado al pueblo de Liberia porque abrió demasiados frentes que luego no pudo contener. Taylor calificó estas afirmaciones de “falsas”.
(Daily Observer, Liberia, 18-02-10)