Pequeño país del África Occidental, Togo registró en 2015, 303.000 turistas con un ingreso en hoteles de 26 millones de francos CFA. Esta información fue dada ayer martes por la ministra de Turismo, Bernadette Legzim-Balouki, en la apertura de la sexta edición del Foro Internacional sobre la inversión hotelera en África que tenía lugar los días 21 y 22 de este mes en Lomé.
Estas cifras, según la ministra, por otra parte modesta, reflejan, sin embargo, una evolución gradual que comenzó en la década de los años 2000. «El objetivo es superar la barrera de los 500.000 turistas en 2020 con unos ingresos acordes a este crecimiento».
El ritmo de crecimiento que el gobierno ha decidido imprimir al turismo de Togo es sosegado: «entre las acciones concretas que confirman esta voluntad política, figura la inscripción del sector turístico entre los sectores de crecimiento en la Estrategia de crecimiento acelerado y Promoción del empleo (SCAPE, documento de referencia sobre el periodo 2013-2017), que es el instrumento nacional de planificación del desarrollo».
Hay que recordar, que Togo dispone de un gran potencial turístico que puede optimizar al sector que hoy en día sigue siendo un sector de alto crecimiento.
Se cita, como ejemplo, la variedad de paisajes y la diversidad cultural, incluyendo los hábitats históricos y típicos como el famoso Koutammakou, clasificado como Patrimonio Mundial de la UNESCO.
Por otra parte, el sector generó 78.500 puestos de trabajo en 2015, según el informe de 2016 del Consejo Mundial de Viajes y Turismo en Togo, donde se informa que el gasto de los visitantes en Togo ese mismo año llegó a 119 mil millones de FCFA. Una cifra que debería experimentar un crecimiento del 3,8% en 2016 según la misma fuente.
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