El cadáver de un tiburón blanco de la familia Carcharodon Carcharias (Grandes Blancos) apareció recientemente varado en una playa de Alhucemas. Tal y como informaron los medios locales, el animal, en peligro de extinción, quedó atrapado en las redes de los pescadores de la zona e, incapaz de nadar, la corriente acabó arrastrandolo a la orilla donde, posteriormente, tres pescadores encontraron el cuerpo ya sin vida.
Los medios de comunicación especializados en temas medioambientales informaron de que el ejemplar rondaba la tonelada y medía casi cinco metros.
«En general, el tiburón blanco no vive en el Mediterráneo. Los turistas y visitantes de la zona no tienen nada que temer», explicó el biólogo Youness El Beghdadi, «una especie más pequeña, los tiburones azules, si que pueden encontrarse en altar mar«.
Fuente: Yabiladi
[Traducción y edición, Sarai de la Mata]
[Fundación Sur]
Artículos Relacionados:
– La caza furtiva, amenaza mundial
– Incremento de la caza furtiva de rinocerontes y elefantes en Namibia