La petrolera Shell ha declarado el día 11 de marzo que ha cerrado dos plantas de gas que abastecían las centrales eléctricas de Nigeria, para poder llevar a cabo las reparaciones de los conductos de abastecimiento dañados en la región productora de petróleo. “Hemos cerrado las plantas de gas de Sapele y Oben, por razones técnicas. El cierre será temporal ya que la compañía está trabajando contrarreloj para restablecer la producción normal”, declaró el portavoz de Shell, Precious Okolobo.
La suspensión era necesaria para permitir reparar el conducto Trans Forcados, que ha sido saboteado por desconocidos.
Las plantas Sapele y Oben fueron cerradas en 2008 por los ataques a las infraestructuras de conductos y habían retomado la producción en pasado mes de noviembre.
Los funcionarios de Nigeria atribuyen la escasez de gas para abastecer las centrales eléctricas como la razón por la que el abastecimiento de electricidad es inadecuado en el país.
La región del sur de Nigeria, productora de petróleo está volviendo a la estabilidad después de años de disturbios durante los cuales el país, el octavo exportador del mundo de petróleo, vio reducida su producción en un tercio.
Miles de rebeldes que persiguen que las comunidades locales obtengan una mayor proporción de los beneficios del petróleo, recientemente han depuesto las armas en respuesta a una amnistía del gobierno.
Shell asegura que ha estado produciendo alrededor de dos tercios del gas doméstico total de Nigeria, principalmente para centrales eléctricas, durante los últimos años.
Nigeria, rica en petróleo y gas, produce cerca de 3.000 megavatios de electricidad para una población de 150 millones de habitantes. En comparación, Suráfrica genera 15 veces más para una población que es una tercera parte.
(News 24, 11-03-10)