El presidente de Zambia Edgar Lungu ha decidido ser muy duro con los que prendieron fuego al mayor mercado de Lusaka, el pasado 30 de junio. Lungu ha declarado que “Si sanear esta situación requiere medidas extremas de seguridad, lo haremos, aunque algunos ciudadanos pierdan sus derechos. Muchos lo han perdido todo y si me porto como un dictador, espero que lo comprendáis. No toméis la ley en vuestras manos”.
El United Party for National Development (UPND), partido de la oposición, ha pedido al gobierno que actué profesionalmente y busque las raíces de la indignación social. Según su líder, Mutale Nalumango, “Hacemos una llamada al gobierno para no politizar la tragedia y dejar el asunto en manos de los investigadores profesionales. Expresamos nuestra empatía hacia las víctimas”.
La policía de Zambia ofrece una prima de 500.000 kwachas (48.572 euros) a las personas que ofrezcan información que lleve al arresto de los responsables del incendio.
Ismail Akwei
Fuente: Africanews
[Fundación Sur]
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