El portavoz del partido de la oposición burundesa, Unión por la Paz y la Democracia (UPD), Patrice Gahungu, fue asesinado por desconocidos en esta capital, confirmaron hoy fuentes familiares.
Clementina Nsabiyimbona, esposa del portavoz asesinado , notificó a una emisora de radio que casi al filo de la madrugada de este miércoles hombres armados dispararon contra Gahungu mientras permanecía en su vehículo cerca de su casa en el distrito de Gasenyi.
en Bujumbura
Nsabiyimbona declaró a una agencia de noticias que se trató de un asesinato político porque él (su cónyuge) «no tenía problemas con nadie».
El crimen del portavoz del UPD es el último de una serie de homicidios tras la cuestionada reelección del presidente Pierre Nkurunziza el 21 de agosto.
Durante las fuertes manifestaciones contra el tercer mandato de Nkurunziza en mayo pasado, el líder de esa pequeña organización política opositora, Zedi Feruzi, resultó muerto aquí junto a su guardaespaldas por un comando armado no identificado.
A la lista de agresiones se sumó luego el exjefe de Estado Mayor de las Fuerzas Armadas durante la guerra civil (1993-2005), excoronel Jean Bikomagu, quien fue muerto en agosto por desconocidos cuando regresaba a su domicilio.
Este crimen ocurrió a menos de dos semanas después de que el exjefe de Inteligencia de Burundi, general Adolphe Nshimirimana, fuera asesinado tras su auto recibir el impacto de un misil lanzado por anónimos en el barrio capitalino de Kamenge.
Un día después de este hecho el reconocido activista por los derechos humanos Pierre Claver Mbonimpa quedó herido por desconocidos cuando caminaba rumbo a su casa en esta capital.
También el presidente del gobernante partido Consejo Nacional para la Defensa de la Democracia en el capitalino distrito de Kanyosha, Come Harerimana, falleció a inicios de agosto tras ser tiroteado cuando viajaba en moto hacia su oficina.
Burundi está sumido en una grave crisis política desde que en abril pasado Nkurunziza anunciara que buscaría un tercer mandato.
Tal aspiración fue rechazada por la oposición al argumentar que viola la Constitución y los acuerdos de paz de Arusha que pusieron fin a la guerra civil.
La situación de seguridad sigue deteriorándose en el país, donde los crímenes selectivos corroen ahora el conflicto interno.
Según estimados de organizaciones internacionales, las violentas protestas contra los planes de Nkurunziza de perpetuarse en el poder costaron más de 70 muertes y unos 150 mil burundeses huyeron a países vecinos por temor a la reedición de anteriores conflictos.
Prensa Latina (Fundación Sur)
