Si un santo es un hombre cuyo valor moral y espiritual es muy elevado, el comportamiento tan ejemplar que los creyentes se sienten invitados a seguir su camino como modelo de vida, entonces puede ser que existan tres santos en Bangui.
El reverendo Nicolás Guerekoyame Gbangou de 55 años de edad pastor de la iglesia evangélica Elim Bangui M´Poko y jefe de la iglesia protestante centroafricana, Monseñor Dieudonné Nzapalainga de 46 años , arzobispo de Bangui y jefe de la iglesia católica y Omar Kobine Layama de 53 años presidente de la conferencia islámica son dentro del caos de la guerra centroafricana y cada vez más llamada como una guerra de religiones, incansables apóstoles de la no violencia y asombrosamente muy amigos los tres.
Los tres guías religiosos no han cesado jamás desde el ataque y la toma del poder por los rebeldes musulmanes de Seleka de recorrer el país , de hacer encuestas sobre los crímenes, de denunciar a los asesinos, de hacer llamadas a los responsables políticos centroafricanos y la comunidad internacional de tomar en mano sus responsabilidades y de predicar juntos la paz , el perdón, la reconciliación.
Ellos están tan unidos que el día 5 de Diciembre que fue el día del comienzo del ciclo de violencia y baño de sangre de las milicias anti-Seleka o anti-balaka que significa anti-machete en la lengua sango, se ampararon en Bangui y al arzobispo consciente de que todos los musulmanes estaban en peligro amenazados por los combatientes cristianos que habían salido de la selva, ofreció refugio al imán en su iglesia de San Paul. “El arzobispo me ha llamado y una unidad de la FoMAC ha venido a buscarme. Yo mismo fui escoltado por cristianos de mi barrio” cuenta el imán Layama.
Publicado en Le Monde Diciembre 2013.
Editado y traducido para Fundación Sur