Domingo 3 de abril en una concurrida calle de Asmara, capital de Eritrea, los militares abrieron fuego contra los reclutas que trataban de escapar de un camión del ejército. Escondido en la multitud, un hombre graba la escena con su teléfono móvil. En este país, cuyo régimen es considerado uno de los más represivos en el mundo y un informe de la ONU, publicado el miércoles, 8 de junio asegura que se perpetran crímenes contra la humanidad desde hace veinticinco años, el documento grabado no tenía ninguna posibilidad de ser difundido. Sin embargo, lo fue.
Si la grabación sonora de esta tragedia, que dejó dos muertos y once heridos, según el ministro de Información, ha permitido que miles de eritreos sepan que había sucedido, se debe a Radio Erena, una emisora basada París, con una docena de corresponsales en todo el mundo
«Transmitimos toda la información que los medios de comunicación locales, que son todos herramientas de propaganda del gobierno, no ofrecen, explica Biniam Simon, cofundador y director de Radio Erena. Damos noticias internacionales, proyectos humanitarios nacionales… En definitiva, todo lo relacionado con Eritrea. En estos momentos estamos hablando mucho de las tensiones con Etiopía. Hace un par de semanas, el tema central eran los barcos hundidos en el Mediterráneo o las expulsiones de eritreos desde Sudán”.
La radio, que cuenta con una docena de corresponsales en todo el mundo, emite dos horas al día. La parrilla de programación incluye cuestiones temáticas en torno a la política, la cultura, el entretenimiento y las emisiones por satélite, Internet y aplicación de telefonía móvil. «Somos el único medios de comunicación independientes de Eritrea. La mayoría de nuestros oyentes están dentro del país, que se asemeja a una enorme prisión».
En Eritrea, donde el servicio militar es de duración ilimitada, no hay libertad de expresión. El país conducido con mano de hierro por Afeworki, jefe de Estado desde la independencia el 24 de mayo de 1993, figura en el lugar número 180 y último de Reporteros sin Fronteras, que financia esta emisora desde su creación en junio de 2009. En la actualidad, al menos cinco periodistas han sido detenidos y se encuentran en las cárceles del régimen.
«La fuga no es siempre una solución»
Radio Erena (que significa «Nuestra Eritrea» en Tigrinia, el idioma oficial) nos cuenta que ahora es muy difícil vivir en Eritrea, especialmente para los jóvenes, explica Biniam Simon, que se aprovechó de una estancia en un seminario en Japón, cuando era un famoso periodista de la televisión nacional Eri TV, para escapar. Pero la fuga no es siempre una solución. Puede serlo para aquellos cuyas vidas están realmente en peligro, pero para la mayoría de la gente, es mejor permanecer en el interior del país. Los migrantes se someten a enormes riesgos, que pueden conducir a la muerte, en condiciones atroces en medio del Sahara o en el fondo del Mediterráneo. Es por esto que recomendamos a los eritreos quedarse en casa. «Los programas especiales se emiten regularmente para los refugiados, lo que les permite contar su historia en directo y prevenir a aquellos que están tentados por el exilio de los peligros que les amenazarán en Egipto, Libia y Sudán.
Eritrea que tienen agentes, comparables a los espías, fuera de sus fronteras. A los refugiados les llaman «mosquitos». «A veces recibimos correos insultantes, llamadas extrañas, pero no pasa nada porque los agentes están fuera de Eritrea y saben que corren el riesgo de expulsión de su país de acogida y por lo tanto se mantienen cautelosos. «En agosto de 2012, la radio fue víctima de un ataque que interrumpió las emisiones durante tres semanas. La investigación demostró que el ataque vino de Eritrea, pero la queja presentada en Francia por Reporteros sin Fronteras no tuvo ningún seguimiento.
«Cuando creamos la radio, queríamos dejar una huella, impregnar a la sociedad de Eritrea, recuerda Biniam Simon. También queríamos llegar a ser un medio independiente y reconocido como tal, del que la gente pudiera decir: “si lo dice Erena, es que es verdad». Ha sido un largo camino pero lo hemos conseguido. Sin embargo, queda mucho por hacer, sobre todo para ganar oyentes en el este de África, Yibuti y Somalia, a través de nuestros programas en árabe. ¿Podrá un día Radio Erena emitirse desde Asmara? Veremos. Por ahora, por supuesto, la respuesta es: «de ninguna manera».
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Fundación Sur
