Para poder entender bien la situación actual en que se encuentra Togo necesitamos recapitular la historia de esta nación.
En 1960 se establece la independencia de Togo, tras haber sido protectorado alemán desde 1884 hasta la finalización de la segunda guerra mundial, dividiendo el país, entregando la parte occidental del país a Gran Bretaña, mientras que a Francia se le otorga el área oriental por mandato de la Liga de las Naciones.
En 1967, Gnassingbe Eyadema toma el poder en un golpe de estado sin derramamiento de sangre. Inmediatamente todos los partidos políticos son disueltos. Es reelegido en 1986. En 1992 Eyadema aprueba la nueva constitución, que permitía solo dos mandatos presidenciales. Eyadema en 1993 disuelve el gobierno, desatando protestas por todo el país y originando enfrentamientos con las fuerzas policiales del país y con ello empieza la diáspora de miles de personas. Aun así Gnassingbe es reelegido en 1998 y 2003.
En 2005 muere Eyadema a los 69 años, tras 38 años en el poder. Las fuerzas militares del país designan a su hijo, Faure Gnassingbe, como presidente del estado. En el entorno internacional, se percibe como un golpe de estado por parte del hijo de Eyadema, y tras la presión internacional, Faure se retira y acuerda celebrar elecciones presidenciales. Gnassingbe gana las elecciones y aunque la perspectiva internacional es de una victoria justa, la percepción interna del país es la de unas elecciones amañadas, lo que desencadena una violencia callejera letal entre partidarios rivales, donde cientos de personas murieron desafiando su victoria.
La Unión Europea, en 2007, restablece la cooperación económica total después de una suspensión de 14 años, citando las exitosas elecciones multipartidarias de Togo. Ya que el año anterior el gobierno y la oposición firman un acuerdo que prevé la participación de los partidos de la oposición en un gobierno de transición.
En 2012 los enfrentamientos en las manifestaciones cogen auge, se reúnen en Lomé para protestar contra las reformas al código electoral que favorecen al partido gobernante. Al año siguiente, el partido gobernante gana dos tercios de los escaños parlamentarios en las elecciones.
El gran problema se establece en el que desde hace 12 años, Faure Gnassingbe ha gobernado la nación de Togo, en África Occidental. La oposición de Togo ahora quiere cambios en el sistema de votación y un límite de mandato para la presidencia. La publicación DW habló con Alex Vines, jefe del Programa de África en Chatham House, en Londres, para obtener más información.
Gnassingbe ganó dos elecciones más en 2010 y 2015. Ambas estuvieron marcadas por la controversia, y la oposición las calificó de fraudulentas, pero la Unión Europea, principal prestamista internacional de Togo, dijo que las elecciones de 2015 «se desarrollaron con calma, confirmando el apego del pueblo togolés a la democracia».
La Unión Africana y el bloque regional ECOWAS también declararon que la votación fue libre y transparente.
Hasta 2017, la mayoría de la oposición contra Gnassingbe se concentraba en la capital costera del país o cerca de ella, esencialmente en la capital, Lomé, y en la ciudad norteña de Sokode. Las protestas antigubernamentales ahora se han extendido al resto del país de África occidental de siete millones de personas.
¿Qué es lo que pide la oposición?
Una coalición opositora de 14 partidos y organizaciones de la sociedad civil han organizado las últimas rondas de protestas, sospechando que el presidente Gnassigbe, que se encuentra en su tercer mandato en el cargo, buscará la reelección en 2020. Los grupos de oposición han protestado contra los cambios en la ley electoral y también han exigido que se restablezcan los límites sobre cuántos términos puede cumplir el presidente.
En un intento por apaciguar a sus oponentes, Gnassignbe presentó un proyecto de ley en septiembre que reformaría la constitución y reintroduciría un límite de dos mandatos. Pero los líderes de la oposición son escépticos de que esto se aplique retroactivamente, y temen que Gnassignbe pueda postularse por dos términos más.
En 2015 se introdujo un código penal que penalizaba los delitos contra los medios de comunicación. La radio es el medio más popular, particularmente en las áreas rurales. La principal estación de televisión es Televisión Togolaise, propiedad del gobierno. El gobierno también opera Togo-Presse diariamente. Los medios privados han proliferado. Hay docenas de radios comerciales y comunitarios y periódicos semanales, así como un puñado de estaciones privadas de televisión.
¿Cómo se puede describir la situación política actual en Togo?
Ha habido múltiples manifestaciones en Togo por lo que la situación actual del país es tensa. Hubo demostraciones significativamente más grandes en agosto y algunas de ellas fueron violentas. Esta vez las manifestaciones parecen más pacíficas, pero hay una particular tensión en las calles de Lomé.
En la última ronda de violencia que comenzó en agosto, al menos dos personas murieron en las manifestaciones de agosto, según la administración. Las fuerzas de seguridad desmantelaron las barricadas levantadas por los manifestantes y dispararon gases lacrimógenos contra la multitud.
Las protestas han sido en gran parte pacíficas, pero al menos una persona murió y docenas resultaron heridas en septiembre en una operación en el norte del país, una región que anteriormente se consideraba a favor del gobierno.
Las autoridades a menudo han respondido a las protestas bloqueando la comunicación telefónica y de Internet. Las fuerzas de seguridad tomaron medidas enérgicas contra las manifestaciones nacionales anteriores, dejando varias personas muertas.
El gobierno también ha limitado el acceso a internet en el país, impidiendo que los manifestantes se organicen en las redes sociales. Los mensajes de texto también han sido bloqueados.
Muriel Balda
[ Fundación Sur]
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