La Fundación Alternativas publicó en su Documento de Trabajo nº 11 2013 el estudio «Prácticas y consumos mediático-culturales del colectivo marroquí en España de los profesores Amparo Huertas, Yolanda Martínez y Jordi Moreras» en el que»… se analiza las prácticas y consumos mediático-culturales del colectivo marroquíen España, uno de los más numerosos y con un evidente grado de asentamiento comoresultado de un ciclo migratorio que ya acumula más de cuatro décadas»
Los tránsitos migratorios que unen desde hace décadas el norte de África con Europa sonun episodio más de una historia de vecindad iniciada hace siglos. Cuando Francia, comopotencia colonial, comenzó a importar contingentes de argelinos y marroquíes como mano
de obra para sus fábricas o como soldados para sus ejércitos, se inició el camino para quelos colectivos magrebíes se instalaran de manera perdurable en las sociedades europeas. En cambio, a pesar de que España también ejerció un dominio colonial sobre las regiones del
norte de Marruecos a través del Protectorado (1912-1956), no fue esto lo que motivó elinicio de la emigración marroquí4. La economía española no empezaría a recuperarse de lalarga postguerra y a generar la necesidad de mano de obra hasta casi los años 70. De
hecho, España se perfilaba claramente durante este periodo como una sociedad deemigración, ya fuera hacia Europa o bien hacia destinos más lejanos. Al tiempo que lostrabajadores/as españoles/as emigraban a países como Francia, Bélgica, Alemania o Suiza,
lo hacían en paralelo emigrantes procedentes del Magreb, especialmente de origen marroquí, que a diferencia de sus vecinos/as argelinos/as se establecieron en diferentes países europeos, y no preferentemente en Francia. Esa paradoja histórica de coincidencia
de diferentes flujos migratorios, siempre desde el sur hacia el norte, establece el punto departida del que sería el progresivo asentamiento del colectivo marroquí en España.
Original en : Fundación Alternativas