La PNTF no perjudica a los residentes locales. Al contrario, la Política Nacional de Tierras y Forestas promueve la inversión público-privada en Mozambique, sin perjudicar a la población residente en áreas donde están implantados los megaproyectos existentes en el país.
Esta postura fue defendida por el director nacional de Tierras y Forestas, Simão Joaquim, que hablaba en un seminario de Integración de los Diputados de la Comisión de Peticiones, Quejas y Reclamaciones de la Asamblea de la República (AR), el parlamento mozambiqueño.
El Señor Joaquim afirmó también que la PNTF asegura la participación activa de los nacionales y de los inversores extranjeros en los proyectos de desarrollo.
Según el Señor Joaquim, la Política Nacional de Tierras y Florestas incentiva el uso y aprovechamiento de la tierra, y este recurso contribuye para el desarrollo de la economía nacional y para el bienestar social de los ciudadanos.
El Plan Nacional de Tierras tiene como prioridad la producción de alimentos, crear condiciones para el desarrollo de la agricultura del sector familiar, la promoción de la inversión privada, conservar las áreas de interés ecológico, y actualizar y perfeccionar el sistema tributario del país.
El Señor Joaquím añadió que no se puede conceder el DUAT (Derecho de Uso y Aprovechamiento de Tierra) a zonas urbanizadas, que no incluyen espacios destinados a proyectos sociales y servicios públicos.
Por otro lado, el presidente de la Comisión de Peticiones, Quejas y Reclamaciones, Viana Magalhães, dijo que más del 60 por ciento de las reclamaciones de los ciudadanos, que se presentan en la Asamblea de la República, están relacionadas con conflictos laborales o con conflictos de tierras.
Magalhães, que hablaba en la abertura del seminario, explicó que la problemática de la atribución del DUAT en el país constituye un gran desafío para coordinar los intereses de las comunidades locales con la instalación de megaproyectos.
Por eso, los temas abordados en este seminario dan prioridad a aspectos relacionados con este tipo de conflictos, sobre todo los de la tierra. Se trata de encontrar soluciones viables para que no haya disputas entre los ciudadanos y los inversores.
Según el presidente, el seminario, que duró dos días, fue un acontecimiento importante, ya que permite a los diputados ajustar y consolidar la capacidad de análisis y la posibilidad de dar respuestas adecuadas a las peticiones, quejas y reclamaciones presentadas por los ciudadanos.
Es necesario añadir a esta presentación “oficial”, excesivamente optimista, que el problema de la propiedad, uso y aprovechamiento de tierras es muy complejo en Mozambique. El país posee unos 36 millones de hectáreas de tierra arable. Solamente un 20% de esas tierras son utilizadas actualmente para fines agrícolas. Por otro lado, muchos miles de emigrantes mozambiqueños trabajan en las granjas sudafricanas, que venden una buena parte de sus productos agrícolas y derivados en Mozambique. Tanto la agricultura como el sector agroindustrial mozambiqueño necesitan una gran inversión tecnológica y financiera para una explotación racional y sostenible de los inmensos recursos disponibles en términos de tierra, clima y agua.
La Política Nacional de Tierras y Forestas (PNTF), también llamada la Ley de Tierras, ofrece un cuadro jurídico adecuado… ¡con tal que se cumpla! La Fundación Sur publicó un cuaderno (Cuaderno Mayo-Junio 2012, pag. 15-18), en el que se muestra claramente que, de hecho, muchas veces la ley no se cumple, y que los conflictos continúan.
