Un importante abogado nigeriano de derechos humanos ha lanzado acciones legales para obligar al presidente Umaru Yar’Adua a delegar los poderes ejecutivos en su vicepresidente, mientras él recibe tratamiento médico en un hospital de Arabia Saudí.
Femi Falama, un importante defensor de la democracia, durante el régimen militar en Nigeria, ha declarado que las decisiones del gabinete de ministros en ausencia del señor Yar’Adua son ilegales, porque él no ha cedido “formalmente” el poder ejecutivo al vicepresidente, Jonathan Goodluck.
La nación más poblada de África se arriesga a caer en una crisis si sigue estando poco claro quién está al mando, según el abogado.
“Cuando el presidente no está y no hay un presidente en funciones, los asuntos del gobierno simplemente se paralizan”, ha explicado Falama, un día después de presentar su demanda judicial ante el Tribunal federal superior en la capital de Nigeria, Abuja.
“El propósito de este caso es obligar al presidente Yar A’dua a ceder formalmente el poder al vicepresidente”, ha aclarado.
El líder de 58 años de edad fue llevado de urgencia a una clínica en Jeda, en Arabia Saudí, hace más de tres semanas, después de sufrir fuertes dolores de pecho, se le diagnosticó una pericarditis aguda, que es una inflamación de la membrana que rodea al corazón, que restringe su funcionamiento normal.
El gabinete de ministros ha rechazado las peticiones para que dimita. El ministro de Justicia y Fiscal General, Michael Aondoakaa, ha dicho que Yar A’Dua podía ejercer sus poderes presidenciales desde cualquier parte del mundo.
(Daily Nation, Kenia, 17-12-09)