Los rebeldes de Sudán del Sur indicaron hoy que el acuerdo de paz firmado con el gobierno puede fracasar por la inflexibilidad del Ejecutivo en la aplicación de las medidas de seguridad pactadas.
Según dijo en rueda de prensa la delegación negociadora rebelde, el gabinete rechazó la llegada de los insurgentes con su armamento pesado a esta capital y recordó que los mediadores aceptaron ayudar en el traslado de alrededor de 1. 570 combatientes de la oposición, desde las zonas donde se hallan desplegadas hacia Juba.
Ese tópico es parte de las medidas de seguridad incluidas en el convenio de paz.
«El acuerdo puede desplomarse debido a que no hay un consenso sobre las medidas de seguridad. El gobierno muestra indiferencia sobre el traslado de nuestras fuerzas», apuntó Taban Deng Gai, jefe del equipo negociador por la insurgencia.
Asimismo, añadió que las autoridades impidieron la llegada este lunes a la capital de un grupo de generales de la Policía -perteneciente a la oposición- al impedir el despegue en la ciudad de Malakal de un avión de la ONU que volaría a la zona de Feqak, el este del estado del Alto Nilo, para trasladarlo a la capital.
El 2 de marzo, el vicepresidente de la delegación de los rebeldes, Ramadan Hasán Laku, declaró que el retraso de la llegada de los opositores a Juba se debió al fracaso de los mediadores, la Autoridad Intergubernamental para el Desarrollo, en cumplir la agenda de procedimientos transitorios relativa al acuerdo de paz, citaron medios de prensa.
Prensa Latina
(Fundación Sur)
