Nigeria y China informaron recientemente que cooperarán en sus esfuerzos para acabar con el creciente número de ciudadanos chinos que participan en delitos financieros en el país africano. El esfuerzo conjunto se produce después de que el embajador chino Yu Dunhai visitara la agencia anticorrupción de Nigeria, la Comisión de Delitos Económicos y Financieros (EFCC, por sus siglas en inglés), en Abuja.
En una declaración publicada en el sitio web de la EFCC el martes, Dunhai expresó su pesar por la creciente tendencia de ciudadanos chinos involucrados en delitos financieros en Nigeria. Aseguró a las autoridades nigerianas que el gobierno chino está dispuesto a enviar delegados para trabajar con las agencias locales de aplicación de la ley para abordar el problema. Al mismo tiempo, Dunhai instó a las autoridades a proteger los derechos de los ciudadanos chinos mientras se llevan a cabo las investigaciones.
Desde noviembre, las autoridades nigerianas han arrestado al menos a 400 ciudadanos chinos sospechosos de delitos cibernéticos, fraude en las telecomunicaciones y minería ilegal. Muchos de ellos se enfrentan a juicio. Pero el analista político nigeriano Chukwudi Odoeme advirtió que la influencia de China sobre el proceso podría socavar el estado de derecho.
“La colaboración parece buena, pero la relación entre Nigeria y China es algo que resulta sospechoso en este acuerdo en particular”, dijo Odoeme. “La colaboración puede verse frustrada en el sentido de que China tendrá una influencia indebida, e incluso puede conducir a la liberación política de esas personas en lugar de someterlas al sistema de juicio penal de Nigeria”.
China es el mayor socio comercial de Nigeria en términos de valor, con un comercio total de 5.000 millones de dólares en 2023. En el primer trimestre del año pasado, las empresas chinas proporcionaron el 23 % de las importaciones totales de Nigeria. Los críticos argumentan que los ciudadanos chinos están explotando las rutas comerciales y las lagunas legales de inmigración para ingresar ilegalmente a Nigeria y participar en actividades delictivas. Las autoridades dicen que se descubrió que muchos de los ciudadanos chinos arrestados vivían en Nigeria sin la documentación adecuada.
El analista de asuntos públicos Jaye Gaskia expresó su preocupación por la transparencia de la colaboración. “¿Sobre qué base se va a iniciar esta colaboración? “¿Con qué propósito?”, preguntó. “Las conversaciones en torno a tratar de desarrollar tales estrategias de colaboración también deben ser transparentes, para que los ciudadanos puedan interrogar el proceso para ver si el interés nacional se va a socavar de alguna manera«. “Tenemos que ser cuidadosos y tenemos que asegurarnos de quién lleva a cabo el proceso”, dijo Gaskia. “El mejor escenario posible es que el país no ceda su propia soberanía en términos de cómo va a suceder esto”.
La deuda de Nigeria con China supera los 5.000 millones de dólares, más que los préstamos bilaterales adeudados a todos los demás países juntos. Mientras tanto, Nigeria está buscando el respaldo de China para unirse a la agrupación de las 20 economías más grandes del mundo, el G20, y asegurarse un asiento permanente en el Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas. Pero el analista político Rotimi Olawale cree que la deuda no debería influir en la forma en que Nigeria maneja los casos penales. “No creo que la deuda que le debemos a China, 5.000 millones de dólares, afecte en nada”, dijo Olawale. “Esas son las relaciones de gobierno a gobierno. “Lo más importante es que el caso no se politice. Debemos definir claramente nuestras reglas y hacer cumplir nuestras leyes”.
Anteriormente, el parlamento de Nigeria había pedido la deportación masiva de inmigrantes chinos ilegales.
Timothy Obiezu
Fuente: Voice of America (VOA news)
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