30.000 kilos de productos eléctricos y electrónicos llegan cada mes a Ghana. Todos los días se queman cientos de kilos de basura eléctrica y electrónica en uno de los mayores vertederos del mundo, situado en pleno corazón de Accra.
El periodista y ambientalista Mike Anane, lleva 10 años denunciando la constante llegada de desechos eléctricos provenientes de Europa a su país. Anane documenta todos los meses la llegada de barcos al puerto de Tema cargados con restos de ordenadores, frigoríficos, televisiones, lavadoras y todo tipo de aparatos, en su gran mayoría inservibles, que llegan a las costa ghanesas etiquetados como ayuda al desarrollo. Una “ayuda” proveniente de diferentes países europeos que se envía hasta allí con el pretexto de contribuir a cerrar la brecha entre el llamado norte y el sur. Es basura tecnológica.
Anane indignado dice “a pesar de la crisis económica en Europa la llegada de residuos electrónicos no disminuye. Al contrario, cada vez llega más. Cada mes desembarcan en el puerto alrededor de 600 contenedores con casi 30.000 kilos de productos electrónicos y eléctricos. A través de las carcasas de los ordenadores ha podido establecer que la mayor parte de la basura que llega a Ghana fue desechada en Reino Unido, Alemania. Bélgica, Italia, Dinamarca, Holanda y España. Pero estas pruebas no son suficientes para emprender una acción legal contra estos países que contaminan el suyo.
Adriana Carrillo. Revista Encuentros
A fondo Enero 2014