El gobierno interino de Madagascar ha pospuesto las elecciones que pretendían terminar con el estancamiento político de cuatro años en la isla, después de que un tribunal especial encontrase factores externos que han desbaratado los preparativos de las elecciones.
El Consejo de Gobierno decidió “llamar a la CENI (Comisión electoral) para determinar un nuevo calendario electoral”, según anunció en un comunicado, abriendo el camino para una nueva fecha para las elecciones.
Un tribunal electoral declaró el día 28, que una causa mayor había comprometido la organización de las elecciones presidenciales y parlamentarias para el día 24 de julio.
El tribunal llegó a la conclusión de que la suspensión de los fondos prometidos por los donantes, y el rechazo internacional de los tres polémicos candidatos presidenciales, hace poco probable que la isla del Océano Índico esté lista para celebrar las elecciones en esa fecha.
El líder interino Andry Rajoelina, de 38 años, que se hizo con el poder respaldado por el ejército, en 2009, había pedido el día 27 de mayo un mes de suspensión de las votaciones.
Rajoelina se negó a dimitir de su cargo en los dos meses previos a las elecciones, como se le pide.
La Unión Africana mientras tanto se ha negado a reconocer su candidatura, junto con la de la mujer de su rival, Lalao Ravalomanana, y el ex presidente Didier Ratsiraka.
El jefe de la ONU, Ban Ki Moon, ha pedido a los tres candidatos que se retiren de la carrera presidencial.
Madagascar ha estado en un limbo político desde que Rajoelina, un joven ex disk-jockey y alcalde de la capital, Antananarivo, se hizo con el poder derrocando al anterior presidente Marc Ravalomanana, en 2009.
Según un plan impulsado a nivel internacional, que pretendía devolver al país al gobierno constitucional, ninguno de los dos políticos tomaría parte en las nuevas elecciones.
Pero cuando la esposa de Ravalomanana anunció que ella se presentaría, Rajoelina declaró también su candidatura.
(Times, Suráfrica, 30-05-13)