El Jefe de Estado Mayor adjunto de las Fuerzas Armadas guineanas, el general Mamadou Sampil, fue liberado el día 27 de mayo, tras haber sido retenido el día anterior por los soldados amotinados en el cuartel Alpha Yaya Diallo, de Conakry, el más grande de la capital y del país. Los soldados se han amotinado y, armas en mano, piden el pago de los atrasos que se les debe; la destitución del general Mamadou Bailo Diallo y la bajada del precio del saco de arroz, entre otras cosas.
Según los portavoces de los militares, los otros altos mandos del ejército han desaparecido, dejando la ciudad en manos de los jóvenes soldados. Además de la liberación del general retenido por parte de los soldados, también fueron liberados los militares que habían sido detenidos por los recientes acontecimientos en Conakry, que estaban en la cárcel de Kassa.
En otras zonas del país, concretamente en las provincias de Kindia y N’zérékoré, los soldados en huelga dispararon sus armas de fuego, sembrando el pánico entre la población, la tarde noche del lunes 26. Los guineanos cerraron todos los negocios y se refugiaron en sus casas.
Al día siguiente, el martes 27, la calma parecía haber vuelto a las calles de Conakry y las provincias de Kindia y N’zérékoré. Entre la desbandada de generales del ejército y el amotinamiento de los militares, que piden el pago de los atrasos que se les debe, aunque todavía no se ha encontrado una solución a la crisis en el ejército.
(Guinee 24, 27-05-08)