Los rebeldes tuareg de Níger declaran que han secuestrado a cuatro trabajadores franceses que trabajan en las minas de uranio del norte del país. El Gobierno del país, desde la capital, Niamey, ha confirmado los secuestros y han asegurado que están haciendo todo lo posible para lograr su liberación. La mina en la que trabajaban es de Areva, la compañía nuclear francesa.
Los rebeldes del Movimiento de Níger para la justicia, MNJ, piden desde que comenzaron su andadura una mayor autonomía para su región y un reparto más justo de las riquezas mineras de Níger.
El MNJ explica en su página web que los trabajadores franceses han sido secuestrados para enviar un mensaje de advertencia a las compañías extranjeras que operan en el país. Los rebeldes aseguran que los franceses no corren ningún peligro y que están dispuestos a entregárselos a la cruz roja.
Durante varios meses, el norte de Níger ha estado en estado de emergencia y se ha aislado del resto del país. Recientemente, el Gobierno ha prometido protección militar para las minas de uranio y las instalaciones petroleras.
Se han producido enfrentamientos frecuentes entre el MNJ y el ejército, pero el Gobierno se ha negado a hablar con los rebeldes a no ser que estos entreguen las armas primero.
Con el aumento de la demanda de energía nuclear, el precio del uranio se ha disparado, y los recursos de Níger están teniendo una enorme demanda.
En el pasado, Francia tenía el monopolio de las minas de uranio, pero recientemente se han firmado contratos con otros países, entre los que se incluye China.
(African News Agency, 23-06-08)
