La decisión de los organizadores de cancelar la carrera de Dakar, tan sólo unos días antes de que empezase, fue un golpe de propaganda para la red terrorista de al Qaeda, según los analistas. Pero esto no es nada comparado con que la carrera hubiese empezado y los terroristas hubieran logrado atentar contra la carrera automovilística.
Los grupos de Al Qaeda en el norte de África han estado planeando ataques a objetivos franceses, al paso de la carrera por Mauritania, según los servicios de inteligencia francesa.
El asesinato de cuatro turistas franceses el pasado 24 de diciembre, en Mauritania, fue un testimonio de la seriedad de las amenazas, por lo que se decidió suspender la carrera. El grupo terrorista, hizo pública en una web islámica su autoría, además de la de otros ataques en el norte de África, y amenazó la carrera, no sólo a su paso por Mauritania.
Los expertos consideran que, tras el 11 S, los mayores éxitos de la organización fueron los ataques bomba en Madrid y en Londres, desde entonces intentan llevar a cabo ataques de la misma magnitud, pero no lo han logrado, ahora deben estar arrepentidos por haber lanzado las amenazas demasiado pronto, acabando ellos mismos con la posibilidad de haber realizado un ataque mucho mayor. Estos errores se deben, según los expertos a que los grupos de Al Qaeda del Magreb, no están bien organizados ni equipados, todavía. Lo que buscan siempre es el mayor impacto posible en los medios de comunicación, aseguran los expertos.
(IOL, 05-01-08)