El principal partido de la oposición de Camerún ha afirmado el día 10 de octubre que las elecciones presidenciales en el país del África Central, han sido fraudulentas y asegura que está compilando pruebas para una queja oficial.
El veterano presidente, Paul Biya, que es considerado el favorito para ganar otro mandato, ha reconocido que puede haber habido “imperfecciones” en la puesta en escena de la votación de una sola ronda del pasado día 9 de octubre, pero negó que se hubiera producido fraude.
Informes sobre algunos votantes que han votados dos veces mientras que otros no han votado ninguna, podrían minar la credibilidad de las elecciones en la nación productora de petróleo, semanas después de que las elecciones en Zambia han demostrado que un cambio pacífico del gobierno a través de las urnas sí es posible.
Biya, de 78 años, ya ha ocupado el cargo de presidente durante 29 años y el presentarse una vez más ha sido posible sólo gracias a la eliminación del límite de mandatos presidenciales de la constitución, en 2008, una actuación que añadió enfado en las calles, donde los cameruneses ya se manifestaban por los altos precios de los alimentos, protestas que se saldaron con más de 100 muertos.
Aparte de su petróleo, Camerún es la principal entrada marítima de la región, y el granero que suministra a Chad, República Centroafricana, República del Congo y Gabón. Aún así, su crecimiento económico está por debajo de la media de África, y los críticos del gobierno de Biya citan el fracaso de la democracia.
Las elecciones del día 9 terminaron pacíficamente, pero problemas con el abastecimiento de energía significó que el recuento en algunos distritos fue llevado a cabo a la luz de las velas, las linternas de teléfonos móviles o, como un distrito en la capital, Yaundé, las luces de una motocicleta. La publicación de los resultados podría llevar hasta dos semanas.
(Angola Press, 11-10-11)