Africa Is a Country se enorgullece de presentar a un nuevo a asociación: AfroWave Echoes. Utilizando la conveniencia de las plataformas digitales, el siguiente ensayo y la lista de reproducción que lo acompaña son una invitación a disfrutar de la música lejos de los tentáculos manipuladores de los algoritmos corporativos. Esperamos que lo sumerjan en una forma de escucha intelectual y emotiva que se mejora a través de la reflexión, la repetición y la participación comunitaria. AfroWave Echoes se presenta en alianza con la marca de ropa Diop, escúchalo en tu plataforma preferida.
La reciente explosión de artistas como Rema, Amaarae, Tyla y Ayra Starr en el escenario internacional subraya el creciente reconocimiento global de la música africana. En AfroWave seleccionamos listas de reproducción que hablan de las múltiples fusiones y adaptaciones de géneros locales y las escenas que los acompañan en África (incluidos afrobeats, highlife, amapiano y alte) que se están apoderando de las listas locales e internacionales. En un momento en que el periodismo musical enfrenta desafíos, nuestro objetivo es servir como una plataforma que celebre y contextualice el panorama musical de África, al mismo tiempo que construya una comunidad en torno a él.
En el vibrante tapiz de la música popular africana, los hilos tejidos por las mujeres africanas brillan con una resiliencia y brillantez que han desafiado y trascendido las limitaciones de su tiempo. Las músicas a menudo muestran una mayor innovación como respuesta directa a los sistemas patriarcales que restringen su expresión y roles creativos. Esta innovación es una forma de resiliencia frente a las estrictas normas sociales y las limitaciones de género que prevalecen en las sociedades africanas tradicionales y contemporáneas. Al combinar sonidos tradicionales y modernos, articular sus luchas a través de la música y el activismo y aprovechar las plataformas digitales para eludir a los guardianes de la industria, estos artistas crean estilos musicales únicos y fomentan la participación de la comunidad. Operando en la intersección de la tradición y la modernidad, su trabajo no solo aporta vitalidad y dinamismo a la música africana, sino que también desafía y transforma las percepciones sociales de género, ilustrando el profundo impacto de superar la opresión a través de la creatividad.
Las mujeres africanas siempre estuvieron a la vanguardia del surgimiento de la música popular africana. Miriam Makeba, conocida cariñosamente como Mamá África, surgió en 1967 como una fuerza pionera. Sus clásicos, como “Pata Pata”, ofrecieron al mundo una visión de la rica diversidad de la música africana. La voz de Makeba, que encarna el espíritu del continente africano, trascendió fronteras, convirtiéndola en un símbolo de la lucha contra el apartheid y una defensora de los derechos civiles en todo el mundo.
El legado de Makeba allanó el camino para una nueva generación de artistas como Brenda Fassie, Angelique Kidjo y Tiwa Savage, cada uno de los cuales se hizo un hueco dentro del panteón de la música africana. Fassie, apodada “La Madonna de los Townships”, llevó la música pop sudafricana a la fama internacional en la década de 1980 con sus electrizantes actuaciones y letras que resonaban profundamente con la lucha contra el apartheid. Kidjo, de Benín, ha sido celebrada por su fusión ecléctica de tradiciones de África occidental con géneros globales, lo que le valió múltiples premios Grammy. Tiwa Savage, de Nigeria, se ha convertido en una potencia del afrobeat, lo que refleja el panorama en evolución donde las artistas femeninas obtienen reconocimiento por su talento e innovación.
A pesar de sus éxitos, estas mujeres navegaron en una industria dominada por hombres plagada de sexismo y racismo. El matrimonio de Makeba con Stokely Carmichael, un destacado líder del Partido Pantera Negra, en 1968 llevó a la cancelación de sus contratos discográficos y conciertos en los Estados Unidos, demostrando como la política y la discriminación racial la impactaron sobre personal y profesionalmente. Angélique Kidjo ha expresado más abiertamente sus experiencias y puntos de vista sobre la igualdad de género en la industria musical y la sociedad en general. Su música a menudo incluye temas de empoderamiento femenino y ha utilizado su plataforma para hablar en contra de las prácticas culturales que discriminan a las mujeres. La carrera de Kidjo, marcada por su negativa a ser encasillada en roles o géneros tradicionales, desafía las normas y expectativas de género que a menudo limitan las oportunidades creativas y profesionales de las mujeres africanas en la industria musical.
Más recientemente, el vídeo musical de Tiwa para su gran éxito, «Wanted«, la mostraba bailando seductoramente vistiendo un mono catsuit, y fue prohibido en Nigeria por ser «demasiado obsceno«. Este trato puso de relieve los dobles raseros y las contradictorias expectativas sociales puestas en las mujeres en comparación con los hombres, quienes regularmente sexualizan a las mujeres en sus víeos. En 2005, MzBel fue brutalmente atacada después de una actuación por una turba rabiosa de estudiantes de la Universidad de Ciencia y Tecnología Kwame Nkrumah, ataque por el que no recibió justicia. Tanto Tiwa como MzBel hablan sobre cómo los medios de comunicación en ese momento impactaron negativamente en sus carreras debido a la forma en que eligieron expresarse a sí mismos y su arte.
La lucha de las mujeres africanas en la música no se limita a África occidental. Una de nuestras curadoras, Laura, una DJ ruandesa radicada en Dublín, explicó que si bien “las mujeres siempre estuvieron presentes en la música que consumía, aparecían principalmente en videos musicales como coristas y, en general, como tema de las letras«. A pesar de estos desafíos, ella y sus compañeras en Ruanda encontraron inspiración en artistas femeninas que se abrieron paso y ganaron un amplio apoyo.
Jess, otra de nuestras curadoras y DJ que divide su tiempo entre Londres y Accra, recuerda el impacto de canales de música como MTV Base y Channel O en su juventud. Ella nos explicó: “El Canal O fue donde interactué por primera vez con la música africana de otros países y descubrí leyendas como Angelique Kidjo y Brenda Fassie”. A través del Canal O, estaba emocionada de ver finalmente en forma negra africana lo que sólo había podido ver en MTV desde Occidente: mujeres hermosas y sexys bailando con los últimos trajes y moda y cantando sobre temas divertidos y que las entusiasmaban, como decirle a los hombres que no los necesitaban ni se preocupaban por ellos, que se adueñaban de sus cuerpos y su agencia, se sentían ellas mismos y se jactaban de lo atractivas que eran. Estas representaciones la inspiraron a seguir una carrera en la música.
Estas historias de perseverancia y activismo entre las mujeres africanas en la música resaltan su papel crucial en la defensa de los derechos de las mujeres, la justicia social y la igualdad. Han roto techos y forjado caminos para las generaciones futuras, sirviendo como faros de esperanza y llamamientos a la acción para que la industria de la música apoye voces diversas.
Otros artistas notables a destacar de nuestra lista de reproducción incluyen a Lady Donli, quien revolucionó el género clásico del highlife, lo modernizó, le dio la vuelta y realizó su propio camino en la historia de la música. Artistas como Somadina y Mowalola atraviesan sin esfuerzo el punk rock y el EDM, mientras que Bloody Civilian encuentra su propio camino con el r&b electrónico y el pop-fusión. Ayra Starr y Tyla dominan el afropop, Brazy y SGawd son pioneros del “afro sexy”, una mezcla de EDM, afrobeat, Jersey bounce y rap; mientras que Amaarae lo reúne todo, bailando sin esfuerzo entre hip-hop, trap, r&b, pop, rock y afrobeat.
En los espacios gqom y amapiano, artistas como Sho Madjozi y Uncle Waffles también están dando pasos. Madjozi irrumpió en el mundo con “John Cena”, que se convirtió en un éxito viral. Conocida por sus movimientos de baile, Uncle Waffles explotó el año pasado con la canción viral «Adiwele». Hoy en día, es una de las DJ más buscadas del mundo.
Sería negligente no mencionar a la reina de la música francófona contemporánea, Aya Nakamura. Si Beyoncé tuviera un equivalente francés, sin duda sería Aya. Su gran éxito “Dja Dja” es una de las canciones más reproducidas de un artista africano. En 2021, desafió las nociones preconcebidas sobre quién puede ser un ícono de la moda al aparecer en la portada de Vogue francesa. En 2023, agotó las entradas para sus espectáculos en el Accor Arenas de París en 15 minutos, estableciendo un récord para los artistas franceses. ¿Lo mejor de todos estos nombres? Siguen siendo auténticos y fieles a sus raíces africanas, cantando en sus idiomas y estilos locales, reclamando directamente e impulsando su propia cultura.
Estos ejemplos contemporáneos ilustran el éxito de las mujeres africanas en la música. A medida que la audiencia global continúa abrazando la música popular africana, es imperativo que las contribuciones de las mujeres africanas no sólo sean reconocidas sino elevadas. Su resiliencia, creatividad y activismo no son sólo notas a pie de página en los anales de la historia de la música; son capítulos centrales en la narrativa actual de la expresión cultural africana y su impacto en el escenario mundial. El legado de estas mujeres, contra todo pronóstico, sirve como un poderoso recordatorio del papel del arte en el cambio social y la fuerza duradera del espíritu humano.
En la esencia de “La Femme Fatale”, un estereotipo cuya recuperación celebramos, en AfroWave hemos elaborado meticulosamente una lista de reproducción que rinde homenaje al impactante legado de las mujeres africanas en la música. ¡Explora y apoya a algunos de nuestros queridos favoritos!
AfroWave
* AfroWave, una plataforma diseñada para unir África y su diáspora a través de la música, está compuesta por Richard Revangué, Achille Tenkiang, Jess Longdon y Laura Twagirayezu. Africa Is a Country se ha asociado con AfroWave Echoes para presentar su lista de reproducción trimestral de música africana.
Fuente: Africa Is a Country
[Traducción, Jesús Esteibarlanda]
[CIDAF-UCM]
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