Un nuevo informe completo del Banco Mundial sobre la educación en situación de Sudán del Sur apunta a un enorme progreso, como que se ha duplicado la matriculación de niños en la escuela primaria, en tan solo cuatro años, pero también apunta algunos problemas desalentadores, mientras que la nación más joven de África se esfuerza por recuperar terreno perdido.
Según el informe, titulado “Educación en la República de Sudán del Sur: estado y retos para un nuevo sistema”, unos 700.000 niños más se han enrolado en la escuela primaria, entre 2005 y 2009. Un niño en Sudán del Sur ahora tiene un 60 % más de posibilidades de recibir alguna clase de educación, lo cual supone un 40 % más que hace una década.
Sin embargo, Sudán del Sur sigue estando por detrás del resto de países africanos en términos de lograr la educación primaria universal. Los retos incluyen escolarizar a un millón de niños que todavía no pueden acceder a la escuela, la mayoría de los cuales viven en zonas rurales empobrecidas; hacer disminuir la elevada tasa del 60 % de abandono en la educación primaria; y mejorar la calidad de la educación. Las masificadas clases de primaria también tienen graves problemas, con 129 niños de media.
“Este nuevo informe muestra que Sudán del Sur está trabajando duro para construir un sistema de educación inclusivo frente a las enormes necesidades que tiene que satisfacer”, afirmó Bella Bird, Director de país del Banco Mundial para Sudán del Sur. “Para ponerse al mismo nivel que el resto de África, Sudán del Sur debe invertir más y más consistentemente en clases para la educación superior, más escuelas en las áreas rurales, más profesores con formación, así como una asignación más equitativa y eficiente de los recursos para la educación por todo el país”.
El informe averigua que sólo tres de cada cinco profesores recibe un salario del gobierno, con una media de 80 niños por cada profesor asalariado. Los profesores asalariados por el gobierno se distribuyen de forma desigual, desde el 84% de los profesores en la región de Equatoria Este, hasta el 32% en la de Jonglei, donde la mayoría son voluntarios.
Al igual que en muchos otros países, del África Subsahariana, la calidad del aprendizaje de los estudiantes en Sudán del Sur es débil. Alumnos de sexto grado, en una prueba que se hizo principalmente en escuelas urbanas, en cuatro estados, respondieron correctamente el 35% en lengua y el 29% en matemáticas.
“En el lado positivo, Sudán del Sur tiene hoy una oportunidad de oro para prestar más atención a la calidad del aprendizaje en las escuelas, así la educación dará resultados más sólidos y no tan débiles, mientras el sistema se expande a más niños en el futuro”, dijo Ritva Reinikka, Directora de Desarrollo Humano en el Banco Mundial.
El informe también averigua que la educación de los adultos forma una gran parte del sistema de educación de Sudán del Sur, con más de 200.000 escolarizados. Se ofrece una variedad de programas de educación, incluido uno dedicado a miembros, activos o desmovilizados, del SPLA y otros grupos. Sin embargo más de dos millones de adultos todavía son analfabetos.
“El informe es un punto de referencia del sector de la educación en Sudán del Sur, y es particularmente útil en este momento, para la nueva nación mientras desentierra estadísticas que son muy importantes para una perspectiva más completa que la que teníamos antes”, afirmó William Osafo, el líder del equipo del programa de educación de USAID, en Sudán del Sur.
“Como uno de los principales donantes, USAID ha podido aplicar directamente este análisis a sus planes para futuros programas.
(Bikya Masr, Egipto, 13-09-12)