La detención de Karim Wade es arbitraria. Lo declaró el grupo de trabajo de la ONU para el tema, en un documento de nueve páginas dedicado al proceso de apropiación indebida y corrupción contra el hijo del ex-presidente Abdoulaye Wade.
Ha sido especialmente contestada la duración del proceso, que se reflejó en la encarcelación de dieciocho meses. Las normas del Tribunal Especial para la Represión del Enriquecimiento Ilícito, ante el cual Karim ha sido procesado, prescriben un límite máximo de nueve meses. También el Estatuto de este tribunal, establecido por voluntad del presidente Macky Sall –sucesor de Abdoulaye Wade– ha sido criticado. Según los expertos de al ONU se trataría de una “jurisdicción especial”, inadecuada para procesar a Karim, que en el momento de los hechos de los que se lo acusa era ministro.
Festejan en cambio los abogados del hijo del ex-mandatario, celebrando lo que llaman la “victoria del derecho”. Aly Fall, abogado del estado senegalés, contesta en cambio las conclusiones del informe, según el cual Karim debería ser excarcelado e indemnizado. Según Fall, el caso “ha sido juzgado regularmente por jurisdicciones regulares senegalesas”. Las objeciones del gobierno, por otra parte, no han sido incluidas en el informe por haber llegado a los expertos de las Naciones Unidas demasiado tarde para ser tomadas en consideración.
En marzo Karim había sido condenado a seis años de prisión en los mismos días en que su Partido Democrático Senegalés (PDS) lo elegía como candidato presidencial a pesar de que estaba siendo procesado. Inmediatamente después de la sentencia, los abogados de la defensa habían anunciado que apelarían a la Corte Suprema.
misna (Fundación Sur)