Los mototaxis son populares entre los residentes en las grandes ciudades africanas como Nairobi, Kampala, Kinshasa, Uagadugú, Bamako, etc.
Recuerdo cómo en Kampala el fenómeno de los mototaxis comenzó a llenar las calles de la ciudad a partir de los años 90. Desde entonces, se ha convertido en un enjambre de motos que llenan las grandes ciudades. En las últimas elecciones presidenciales de 2021, Museveni se sirvió de este numeroso grupo para su propio plan político.
Lagos, la ciudad más poblada de África, ha comenzado a hacer cumplir su prohibición de mototaxis, informa Chris Ewokor de la BBC. Estos populares mototaxis, aunque son muy útiles e incluso necesarios en las ciudades, también pueden generar conflictos si no están bien organizados y regulados.
Además de las repercusiones para la ciudadanía, parece que la medida tiene un impacto inmediato en la economía. Algunas fuentes calculan en 800.000 las motos que funcionan como medio de transporte de ciudadanos en Lagos, de manera más o menos regulada. La mayor parte de las que lo hacen formalmente están inscritas en alguna de las tres empresas que dominan el sector. Solo una de esas compañías, Gokada, ya ha reconocido que ha tenido que despedir al 70 % de su plantilla de conductores, lo que supone entre siete y ocho mil personas.
El gobierno de Lagos anunció la prohibición hace dos semanas y ésta cubre los principales distritos de la ciudad. Las autoridades dijeron que arrestarán a los ciclistas que incumplan la prohibición y confiscarán sus motocicletas.
El gobernador de Lagos, Babajide Sanwo-Olu, describió a los taxistas como una amenaza para los usuarios de la carretera, citando el aumento de la delincuencia y los accidentes de tráfico.
Los mototaxis son uno de los medios de transporte preferido porque son más rápidos para sortear los atascos de tráfico de la ciudad. Yo mismo lo he utilizado con frecuencia en Kampala. Una gran cantidad de jóvenes en el estado se ganan la vida como mototaxistas y la prohibición seguramente enfrentará una reacción violenta.
Las autoridades desplegaron el martes personal de seguridad y vehículos blindados de transporte de personal en la ciudad en medio de temores de posibles protestas violentas.
Esperamos que los gobernadores de las grandes ciudades se sientan a negociar y planificar una posible convivencia de todas las personas implicadas en los medios de transporte, en Lagos y en otras ciudades.
Los conflictos no se resuelven con la policía y el ejército, sino con una planificación negociada de todas las partes implicadas, garantizada también por las organizaciones del orden. Finalmente, el poder y la gestión se deben basar siempre en el pueblo.
Lázaro Bustince Sola
[CIDAF-UCM]