Los manifestantes sudaneses intentaron marchar hacia el parlamento el pasado jueves 19 de enero, pero fueron interceptados por las fuerzas de seguridad que lanzaron gases lacrimógenos y mangueras de agua contra la multitud.
Encontramos escenas semejantes, de manifestaciones sociales pacíficas, pidiendo respeto a la voz del pueblo y a la democracia por el bien común, en muchos países de África y del mundo.
Hemos admirado la valentía, sobre todo de los jóvenes, manifestándose pacíficamente por las capitales de Burkina Faso, Malí, Kenia, Uganda, Sudan, Etiopía, etc. Los resultados esperados no llegan fácilmente, pues los poderes militares de los dictadores ven sus días en peligro y luchan por imponerse, incluso con las armas.
Algunos piensan que no hay salida de este círculo de violencia y opresión, pero si miramos a la Historia de los pueblos y de la Humanidad, podemos ver que los oprimidos llegan a liberarse del yugo opresor (Sudáfrica), que los encarcelados salen de prisión (Mandela) y que los que luchan juntos por la libertad y la justicia finalmente lo consiguen (Zimbabue).
Volviendo a Sudán, vemos a la sociedad civil luchando por su democracia y libertad. Los manifestantes han vuelto a marchar contra el acuerdo del mes pasado entre los líderes golpistas de Sudán y el principal grupo prodemocrático para establecer un gobierno de transición liderado por civiles, como ya se hizo en 2021.
La sociedad civil advierte: «Estamos en contra de un acuerdo de sumisión. Mientras tanto, las protestas continuarán hasta la caída del régimen militar y la formación de un Estado civil y democrático«, declaró Intesar Marrouf, uno de los manifestantes.
La protesta del jueves estuvo encabezada por los Comités de Resistencia, un grupo de base que ha rechazado rotundamente cualquier negociación con los dos líderes militares de Sudán, el general Abdel-Fattah Burhan y el general Mohammed Hamdan Dagalo, porque ambos lideraron el golpe de estado en 2021, y deben ser juzgados en los tribunales.
Los Comités de Resistencia, uno de los varios actores políticos importantes que rechazaron el acuerdo de diciembre, informaron que habrá varias protestas similares en los próximos días.
Este espíritu de compromiso solidario del pueblo de Sudan para defender su libertad democrática y su preocupación por el bien común, es un ejemplo de entrega y servicio para el bienestar de toda la nación. Este es el único camino de auténtica liberación para toda sociedad humana que sufre diferentes tipos de opresión y de esclavitud.
La verdadera liberación y el desarrollo sostenible no llega desde fuera, aunque sea necesaria la cooperación con otros países, sino que nace desde dentro, desde la misma sociedad civil oprimida, que será la única pionera de su propia liberación y desarrollo integral.
CIDAF-UCM