Las autoridades sanitarias del condado de Kericho, Kenia, están en alerta roja por un presunto caso de ébola después de que un paciente exhibiera síntomas sospechosos de fiebre hemorrágica. Los funcionarios del condado han informado de que la mujer había viajado desde Malaba, una ciudad del condado de Busia, en la frontera entre Kenia y Uganda, para ver a su cónyuge.

Kenia no había tenido un caso de ébola hasta ahora. El brote actual en la República Democrática del Congo es el peor registrado después de una epidemia que azotó principalmente a Liberia, Guinea y Sierra Leona entre 2014 y 2016 y que causó la muerte de más de 11.300 personas. La epidemia se ha extendido a Uganda donde dos miembros de una familia murieron de ébola la semana pasada después de viajar a la República Democrática del Congo para cuidar de un familiar moribundo y asistir al funeral.

El viernes 14 de junio, la Organización Mundial de la Salud dijo que el brote aún no justifica ser declarado una «emergencia de salud pública de interés internacional», lo que significa que requeriría una «respuesta internacional coordinada».

Fuente: All Africa

[Traducción y edición, Carmen Moreno García]

[Fundación Sur]

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