Pierre Nkurunziza, que en la noche del 23 de julio había sido declarado vencedor de las elecciones presidenciales, celebradas en Burundi el día 21, aceptó la propuesta del líder de la oposición de formar un gobierno de unidad nacional, y evitar así una crisis política, que se anunciaba violenta.
Agathon Rwasa, como Nkurunziza, antiguo líder rebelde en la guerra civil del Burundi y líder principal de la oposición, dijo temer un golpe de estado por parte de los generales de Burundi. “Algunos ya empezaron a lanzar la amenaza de una confrontación armada”, dijo Rwasa, refiriéndose a los militares que en mayo aprovecharon de la crisis política, generada por la candidatura de Nkurunziza para un tercer mandato, para intentar tomar el poder por la fuerza.
El golpe de estado fracasó, pero podría ocurrir de nuevo, alertó Rwasa. “Para el bien de Burundi, la idea de un gobierno de unidad nacional tiene que ser aceptada”, dijo el líder de la oposición, añadiendo que su propuesta incluye la celebración de nuevas elecciones, posiblemente dentro de un año.
Fuente: O País Online Traducido por Jesús Zubiría