
La clasificación exclusiva de los países de África ocn mejores, publicada por Jeune Afrique, el pasado 27 de mayo, destaca a los Estados que son pioneros en tres pilares: gobernanza, influencia e innovación. Se analiza, sobre todo, la estabilidad política, el poder militar, la calidad de las universidades, las embajadas en el extranjero, la recaudación de fondos de los startups y el número de artistas reconocidos globalmente.
En primer lugar, este listado se basa sobre todo, en el crecimiento del PIB o el índice de desarrollo humano. En segundo lugar, la calificación es bastante cuestionada por su interpretación parcial del riesgo y de la inseguridad en África. Y, por último, el compromiso de un país no puede ser valorado únicamente por el nivel económico, sino que debe reflejar una visión más integral de sus fortalezas y debilidades. El informe anual Mo Ibrahim es más completo y analiza varios sectores en profundidad.
Este método permite a los países «pequeños» mantenerse a la par con los Estados más grandes, que tienen mayor poder potencial. Así, mientras Sudáfrica ocupa indiscutiblemente el primer puesto del podio, países más pequeños como Botsuana, Mauricio, Seychelles y Cabo Verde, destacan por su gobernanza de alta calidad, lo que les otorga un lugar muy destacado.
Los países mejor desarrollados de África, considerando una variedad de factores como el PIB, el Índice de Desarrollo Humano (IDH) y la preparación para la adopción de la Inteligencia Artificial, son: Sudáfrica, Egipto, Argelia, Nigeria, Marruecos, Kenia, Tanzania, Angola, Ghana y Botsuana.
Los países africanos con mejor gobernanza suelen ser identificados por su alto rendimiento en diferentes índices, como el Índice de Percepción de la Corrupción (IPC) y otros indicadores de desarrollo humano. No hay un consenso único sobre qué países son los mejores, pero algunos destacan: Seychelles, Cabo Verde, Sudáfrica, y Mauricio. Estas naciones son un ejemplo, según el informe de Mo Ibrahim, por sus políticas de gobierno y su sistema electoral, a pesar de los desafíos que deben afrontar.
La Gobernanza sigue siendo el ámbito más valorado, porque de esa gestión en economía, política, cultura, sanidad y desarrollo integral, depende el hecho de que algunos países mejoren su calidad de vida, desarrollo y convivencia, mientras que otros pueblos sufran por la inseguridad, opresión, empobrecimiento y hasta violencia. Como siempre, los Pueblos tienen la Palabra, para decidir la calidad de gobernanza, desarrollo sostenible y convivencia social, aunque el camino supondrá persecución.
CIDAF-UCM


