Slow Food es una fundación con sede en Bra (Italia), cuyo objetivo es conseguir que en África se consuman productos locales africanos con el fin de que los africanos mantengan su identidad y reconquisten la soberanía perdida. Esta organización internacional se fundó en 1989 y cuenta con más de 100.000 miembros en más de 150 países de todo el mundo. La organización, sin ánimo de lucro, tiene la ambición de contrarrestar el auge de la comida rápida que contribuye a la desaparición de las tradiciones gastronómicas de los países.
En una reunión de la Fundación en Bra con periodistas africanos, su fundador, Carlo Petrini, afirma que los africanos abandonan una rica gastronomía propia por la gastronomía europea o internacional. Según el Sr. Petrini la colonización hoy en día pasa por la gastronomía y es hora de poner fin a este proceso y concienciar a los africanos para que consuman africano.
Para el presidente de esta organización, que ha puesto en marcha un proyecto para crear 1000 huertas en muchos países africanos, de las cuales más de la mitad están ya en funcionamiento, la soberanía de un pueblo o de un país pasa por la soberanía alimentaria. África era de la soberanía alimentaria ya que no consumía alimentos africanos y no respetaba a los productores locales.
La Fundación Slow Food tambíen es consciente del problema del éxodo rural que envía a muchos jóvenes del medio rural a las ciudades y piensa que hay que generar el interés por la agricultura en los jóvenes africanos.
Los “organismos genéticamente modificados” (OMG) se introducen de manera subrepticia en África y son los responsables de las consecuencias nefastas que producen y que no son controladas por los africanos. La Fundación está en contra de los alimentos transgénicos debido a que consumen una gran cantidad de agua y aún no se han demostrado sus efectos sobre la salud humana. Por otra parte, son producidos por las multinacionales a las que siempre habrá que pagar derechos.
La Fundación que no pierde nunca la oportunidad de pedir a los africanos que denuncien los OMG también argumenta la falta de respeto de Europa hacia África en su intento de introducir cultivos todavía prohibidos en Europa.
Slow Food ha financiado la elaboración de guías y libros de cocina con platos africanos en diferentes países de África y también apoya la creación de restaurantes especializados en cocina africana.
[Fuente: Slow Food Foundation-Fundación Sur]
