Etiopía ha negado las acusaciones de la organización Human Right Watch sobre que se está torturando a los sospechosos de terrorismo que se tienen encarcelados desde 2006, cuando Addis Abeba envió tropas a la vecina Somalia, para sofocar a los rebeldes islamistas.
El organismo de control, con sede en Nueva York, Human Right Watch, publicó el pasado día 1 de octubre que al menos 90 personas fueron detenidas en Kenia y trasladadas a Somalia y después a Etiopía, después de la invasión de Somalia por parte de Etiopía.
Varios detenidos fueron encerrados en solitario en celdas especiales, con las manos esposadas de maneras dolorosas a la espalda y los pies atados, según el informe, que añade que muchos fueron incomunicados y no había ningún cargo contra ellos.
El ministro de Etiopía de Exteriores, ha asegurado en un comunicado oficial que a pesar de las acusaciones de HRW, ninguna de estas personas ha sido maltratada. “De hecho muchos de los detalles de los que nos acusa HRW no se han podido comprobar y otros, simplemente son mentira. El Ministerio ha añadido que los sospechosos “no fueron detenidos arbitrariamente, sino que fueron encontrados en un escenario de guerra o intentando cruzar la frontera de Somalia con Kenia. “Había razones contundentes para sospechar su relación con terroristas. Bajo las circunstancias de aquella época, hubiera sido irresponsable dejarles marchar, y añade que Mogadiscio, entonces carecía de prisiones de seguridad aceptables.
“Etiopía no ha ocultado la identidad, el destino y el paradero de nadie que haya sido traído al país para su investigación”, añade el comunicado del ministerio etíope.
Pero el grupo de defensa de los derechos humanos asegura que al menos 10 sospechosos todavía se pudren en las cárceles de Etiopía, entre 15 y 21 meses después de que fueran arrestados. Además, todavía se desconoce el paradero de otros 22 presos”.
El comunicado del Ministerio de Exteriores de Etiopía señala, para despejar sospechas, que los servicios de inteligencia de los Estados Unidos, han interrogado a algunos de los sospechosos durante su cautiverio en Etiopía.
(News 24, Suráfrica, 06-10-08)