“Una reunión muy productiva y exitosa”. Así es como el obispo de Tombura-Yambio, Barani Eduardo Hiiboro Kussala, definió el encuentro junto al arzobispo de Juba, Stephen Amenyu, con el presidente de la República de Sudán del Sur, Salva Kiir Mayardit:
“Nos reunimos con el jefe de Estado para asegurarle nuestra cercanía como líder de la Iglesia y como representantes de la Conferencia Episcopal, fuimos en nombre del pueblo de Sudán del Sur para asegurarle nuestra voluntad de colaborar con él y trabajar con él y con el gobierno por la paz y el crecimiento de nuestro pueblo en la República de Sudán del Sur”.
El obispo de Tombura-Yambio agregó que los dos representantes de la Iglesia felicitaron al presidente por la implementación del acuerdo de paz alcanzado el 31 de agosto entre el gobierno sudanés y una serie de grupos rebeldes, por la formación del Gobierno de unidad nacional, y por la decisión de reducir los 32 Estados de la Federación a 10, que era el número original en el momento de la independencia.
Hiiboro alentó al presidente, a sus colaboradores y a la oposición a seguir implementando el acuerdo de paz:
“Le dijimos que va por buen camino y que debe seguir trabajando duro con sus colegas para consolidar la paz en el País […] Subrayamos el hecho de que, aunque es complejo y difícil implementar el acuerdo de paz, no debemos ceder a la tentación de volver a la guerra, pero debemos trabajar incansablemente para restaurar la paz en la República de Sudán del Sur […] El presidente también ha asegurado que nunca llevará a la República de Sudán del Sur a la guerra”.
Los dos obispos informaron también al jefe de Estado sobre el sentimiento del pueblo, sobre el deseo de paz generalizado entre la población, sobre sus sufrimientos y sobre todo lo que ocurre en el país por la guerra, y aseguraron la disposición de la Iglesia para continuar colaborando con el gobierno y otros socios por la paz.
Hiiboro declaró que el presidente señaló estar feliz de conocer a los dos representantes de la Iglesia Católica y «agradeció todo lo que hablamos». En cuanto a la pandemia del coronavirus y el cierre de lugares de culto, el presidente autorizó la reapertura de iglesias:
“El presidente afirmó que el gobierno no puede prescindir de la Iglesia. La necesitamos como lo hicimos durante la lucha por la liberación, cuando la Iglesia estaba allí para unir”.
Fuente: Catholic Daily-Imagen: AMECEA
[Fundación Sur]
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