Omar Al Bashir, el presidente de Sudán, ha anunciado un alto el fuego unilateral por parte de las fuerzas del Gobierno, en la región del oeste del país, Darfur. Además ha desvelado que Jartum tomará medidas para desarmar a varios grupos armados en una aparente referencia a las milicias árabes, los Janjaweed, que supuestamente están relacionados con el gobierno.
“Por la presente anuncio nuestro inmediato e incondicional alto el fuego entre las fuerzas armadas y las facciones beligerantes, ya que se ha puesto en marcha un mecanismo de control efectivo para que respetado por todas las partes implicadas”, señaló Al Bashir.
El gobierno dará comienzo de inmediato una campaña para desarmar las milicias y restringir el uso de las armas entre los soldados de las fuerzas armadas, según el presidente.
Pero los grupos de Darfur, de oposición al gobierno, se han apresurado a rechazar la iniciativa del gobierno, calificándolo de “no sincero”.
Ya ha habido varias declaraciones anteriores de alto el fuego, por parte de Jartum, durante estos cinco años de conflicto en Darfur, que luego se han desvanecido.
Campaña de desarme
El Foro del pueblo de Sudán, una plataforma de personajes del gobierno y de la oposición, habían hecho un llamamiento para que se declarase el alto el fuego.
Sin embargo, Al Bashir no prometió liberar a los prisioneros políticos darfurianos, como también recomendó el Foro.
Bashir también aseguró que el intento de cese de hostilidades pretendía suponer una plataforma para las negociaciones del gobierno con los grupos armados de oposición.
Está previsto celebrar una conferencia de paz en Qatar, a finales de este año, pero los oponentes del gobierno todavía no se han comprometido a asistir.
Al menos 300.000 personas han resultado muertas y más de 2.2 millones desplazadas, desde que comenzaron los enfrentamientos en Darfur, en 2003, según las Naciones Unidas.
Jartum niega las cifras de la ONU y asegura que las personas muertas como resultado del conflicto son 10.000.
Miles de darfurianos no árabes están viviendo en campos de refugiados, para esconderse de los ataques de las milicias Janjaweed.
Este anuncio de Bashir llega cuatro meses después de que el fiscal general del Tribunal Penal Internacional, ICC, pidiera que se emitiera una orden internacional de arresto contra él, por 10 cargos de genocidio, crímenes de guerra y crímenes contra la humanidad, en Darfur.
Sudán ha rechazado la resolución del Tribunal y en los últimos meses ha intentado persuadir al Consejo de Seguridad de la ONU para que invoque una suspensión de un año de duración para cualquier acción legar contra Al Bashir.
Dudas de la oposición
Gibril Ibrahim, un consejero del presidente del Movimiento para la Justicia y la Igualdad sudanés, JEM, uno de los grupos anti gobierno en Darfur, declaró que su grupo duda de la seriedad de la declaración de Al Bashir. “No puedo decir que rechacemos en serio el alto el fuego, pero pensamos que Bashir no lo dice en serio. Esta no es la primera vez que el régimen ha declarado un alto el fuego”.
“En primer lugar, necesitamos la creación de la paz antes de ninguna negociación. Necesitamos que se ponga en libertad a todos los prisioneros políticos darfurianos. Queremos ver una paz real sobre el terreno y en los campos de refugiados”.
JEM quiere ver esfuerzos “serios” encaminados a un alto el fuego duradero por parte del gobierno sudanés, antes de comenzar unas negociaciones formales”, afirmó.
Ibrahim acusó a Al Bashir de utilizar la declaración del alto el fuego como una estrategia para lanzar medidas enérgicas contra los grupos armados de oposición.
“El desarme de los diferentes movimientos sólo puede alcanzarse por la vía del acuerdo de paz”, sentenció. “Diciendo que quiere desarmar a los Janjaweed, está intentando eludir el alto el fuego que ha declarado. De hecho, va a seguir luchando, con el pretexto de que va a desarmar a este o aquel grupo”.
(Aljazeera, 13-11-08)
