El nuevo rearme del grupo terrorista M23 y su impacto en los pueblos del Kivu (parte 1/2), por Lázaro Bustince

22/09/2022 | Bitácora africana

m23_en_goma_2012_cc0.jpgUna insurgencia del grupo rebelde M23 ha desarraigado a más de 170.000 personas desde marzo 2022.

El regreso de un grupo rebelde, inactivo durante mucho tiempo en el este de la República Democrática del Congo (RDC), está acumulando dificultades en las comunidades que ya se enfrentan a docenas de otras insurgencias armadas.

Durante varios meses, el grupo rebelde Movimiento 23 de Marzo (M23) ha luchado contra las tropas congoleñas en la provincia de Kivu del Norte. Los expertos de la ONU dicen que su mirada está puesta en Goma, una ciudad de casi dos millones de habitantes, aunque el grupo descarta esto e incluso pretende dialogar.

El resurgimiento del M23, casi diez años después de que se creyera derrotado, ha socavado la estabilidad regional. La República Democrática del Congo acusa a la vecina Ruanda de respaldar al grupo, mientras que un informe de expertos de la ONU afirma que se vieron a personas con uniformes del ejército de Ruanda en los campamentos del M23. Kigali niega el cargo.

Los civiles se enfrentan a lo peor de la crisis, tal como lo hicieron hace una década: 170.000 han escapado de sus hogares desde finales de marzo, cientos de niños han sido separados de sus familias y el discurso de odio está aumentando en todo el país.

“The New Humanitarian” visitó Rutshuru, el epicentro del conflicto, y Goma, la capital provincial de Kivu del Norte, a principios de este mes: “Hablamos con personas desplazadas, líderes de la sociedad civil, trabajadores humanitarios y funcionarios del M23 y del ejército congoleño”. Todos ofrecieron diferentes perspectivas sobre las causas y consecuencias de la crisis, que representa una gran prueba para el presidente Félix Tshisekedi, cuyo gobierno tiene su sede a unos 2.000 kilómetros al oeste de la capital, Kinshasa.

Tshisekedi hizo de la seguridad en el este del país una prioridad cuando llegó al poder en 2019. Desde entonces ha impuesto la ley marcial; permitió la entrada de tropas ugandesas en la región para luchar contra los militantes islamistas; y aprobó el despliegue de una fuerza en África Oriental.

Sin embargo, más de 100 grupos armados locales y extranjeros siguen activos en el este de la RDC, un legado de las guerras regionales libradas en las décadas de 1990 y 2000. E incluso movimientos vencidos como el M23 ahora se están recuperando. Aloys Tegera, investigador del Instituto Pole, un grupo de expertos con sede en Goma que se especializa en la prevención y resolución de conflictos, señaló: “Nos damos cuenta de lo débil que es este gobierno y que el liderazgo de Félix Tshisekedi es inexistente”.

Lázaro Bustince

[CIDAF-UCM]

Autor

  • Nacido en Izco (Navarra), en 1942, estudió filosofía en Pamplona (1961-1964). Hizo el noviciado en Gap – Grenoble (1964-1965), con los Misioneros de África (Padres Blancos). Estudió Teología en el instituto M.I.L. de Londres, (1965-1969), siendo ordenado sacerdote en Logroño, en los Padres Blancos en 1969.

    Comenzó su actividad misionera en África en 1969, siendo enviado a la diócesis de Hoima en Uganda, donde estuvo trabajando en la educación, desarrollo y formación de líderes durante nueve años. Luego vivió un periodo de trece años en diversas ciudades europeas, trabajando en la educación y capacitación de los jóvenes (Barcelona 1979-1983)) , en Irlanda como responsable de la formación de los candidatos polacos (1983-1985), y en Polonia donde fue Rector del Primer Ciclo de Filosofía Polaco (1985-1991), y se doctoró en Teología espiritual en Lublin, donde fue nombrado profesor de la misma Universidad Católica de Lublin (KUL), de dicha ciudad, en 1991.

    Regresó a Uganda en 1992, y fue elegido Provincial de los padres Blancos de Uganda hasta 1999. Durante este periodo, fue también presidente de la Asociación de Religiosas-os en Uganda (ARU), y pionero en la construcción del Centro Nacional de Formación Continua (USFC). Además inició la Comisión de Justicia, Paz e Integridad de la Creación (JPIC) en 1994, trabajando en la formación de líderes en JPIC.

    En 2000 y 2004 cursó estudios sobre educación en Justicia, Paz, y Transformación de Conflictos, en Dublín. Desde su regreso a Uganda, fue pionero en la capacitación de agentes sociales en JPIC, y en el establecimiento del primer Consorcio de Educación Ética (JPIIJPC), lanzado por seis Congregaciones Misioneras, en 2006. Desde el inicio, y hasta junio 2011, ostentó el cargo de primer Director del Instituto. Al mismo tiempo fue profesor invitado de Ética en la Universidad de los Mártires de Uganda (UMU).

    En septiembre de 2011 fue nombrado director general de África Fundación Sur (AFS), organismo que dejó de existir en 2021. En la actualidad sigue trabajando por África al 100 % siendo, entre otras ocupaciones, editorialista en el CIDAF-UCM.

    ¡Visita su sitio web personal!

Más artículos de Bustince Sola, Lázaro