Sheikh Sharif Ahmed, el nuevo presidente de Somalia, ha declarado que ve como positivo, el papel de Estados Unidos, para ayudar al país del cuerno de África a alcanzar la paz.
Los comentarios, realizados en una entrevista con el-Shorouk, un periódico de Egipto, fueron publicados el pasado 1 de febrero. “Podría decirse que ahora la postura de Estados Unidos hacia Somalia es honesta… Pensamos que la visión americana de Somalia, ahora es positiva”, aseguró Ahmed, que añadió que “en el marco de las negociaciones de Yibuti, América se ha convertido en una fuerza que respalda la paz”.
Las negociaciones de Yibuti son un proceso respaldado por Naciones Unidas que ha ayudado a llegar a la modificación del parlamento para incluir a todas las fuerzas políticas y a la elección de Sheikh Sharif Ahmed, un moderado de la Alianza para la Re-liberación de Somalia, ARS, como presidente del país.
Ahmed ganó sin dificultad las votaciones parlamentarias celebradas el día 31 de enero, contra el otro candidato, Maslah Mohamed Siad, el hijo del expresidente, Mohamed Siad Barre, por 293 votos, frente a 126.
Somalia no tiene un gobierno central efectivo desde 1991, cuando Barre fue forzado a dejar el poder.
Celebraciones por la victoria
Mohamed Nur, un periodista somalí, afincado en Mogadiscio, declaró a Al Jazeera, que la gente había salido a las calles para celebrar la victoria de Ahmed.
El nuevo presidente ha prometido formar un gobierno de bases mucho más amplias e invitó a todos los grupos armados de Somalia, a que tomasen parte en el esfuerzo impulsado por Naciones Unidas para alcanzar la reconciliación en Somalia. Ahmed lideró la Unión de Tribunales Islámicos antes de que las tropas etíopes, con el respaldo de Estados Unidos, invadiesen Somalia, en 2006, con el propósito de expulsar a los islamistas que estaban en el poder.
Ahmed ha sido crítico siempre con la influencia de las anteriores administraciones de los Estados Unidos en Somalia. En 2008, Ahmed condenó los ataques aéreos de los Estados Unidos, para matar a un líder islamista, en la Somalia Central.
Los últimos de los soldados etíopes salieron de Somalia en enero de este año, y la nueva administración de Barack Obama, tomo posesión de su cargo, el mismo mes.
Abdullahi Yusuf, el antiguo presidente de Somalia, dimitió el pasado 29 de diciembre, después de haber sido acusado por los principales poderes, de ser un obstáculo para la paz.
Anmedou Uld Abfallah, enviado especial de la ONU para Somalia, alabó el pasado día 31 la celebración de unas elecciones presidenciales.
(Al Jazeera, 02-02-09)