El presidente de Guinea-Bissau, Umaro Sissoco Embaló, disolvió el pasado 16 de mayo el parlamento, fijando elecciones legislativas para el 18 de diciembre. Sin embargo, el gobierno del país ha decidido posponer la votación al dictaminar que el proceso era impracticable para llevarse a cabo en la fecha propuesta.

Tras una reunión de cuatro horas, en la que han participado la mayoría de los partidos políticos, con y sin escaños parlamentarios, el Gobierno, el Gabinete Técnico de Apoyo a la Gestión Electoral y la Comisión Electoral Nacional, el ministro de Administración Territorial, Fernando Gomes, ha anunciado una propuesta consensuada que fijaría las elecciones legislativa para el 23 de abril de 2023.

Esta fecha se ha proyectado con el objetivo de permitir al ejecutivo tener un margen de maniobra para responder a los deseos generalizados de los principales partidos políticos guineanos que defienden un nuevo registro de votantes, el cual aún no se ha puesto en marcha, pero está previsto para comenzar a finales de noviembre. El proceso de elaboración del censo debe durar, según la ley, 3 meses, por lo que la nueva fecha permitiría realizar estos trámites con más holgura. El gobierno y los partidos quedan ahora a la espera de la aprobación de Umaro Sissoco Embaló, quien debe, como presidente de la República, aprobar y convocar oficialmente las elecciones.

Fuente: RadioJovem

[Traducción y edición, Elena Cañete Montilla]

[CIDAF-UCM]