El presidente de Burundi ha modificado un decreto creando una comisión electoral en el país, para garantizar mejor su independencia y acallar las críticas de la oposición.
Las dos previas versiones del decreto propuesto por el presidente Pierre Nkurunziza, en junio y en diciembre de 2008, ha desatado una oleada de acusaciones de que estaba poniendo freno a las libertades políticas, para asegurar su reelección, en las elecciones de 2010.
En el último texto, se ha quitado una clausula que autorizaba al estado a suspender a cualquier miembro de la comisión del que se sospechase remotamente que estaba perturbando las elecciones, además de otros cambios.
“Estamos satisfechos porque el presidente ha tenido en cuenta nuestras quejas, firmando este nuevo decreto”, aseguró Frederic Banvuginyunvira, vicepresidente del principal partido de la oposición de Burundi, el partido Frodebu.
(IOL, 03-03-09)