Cuatro altos cargos militares de las Fuerzas de Seguridad de Ruanda, han sido arrestados en conexión con la muerte de un clérigo de la iglesia católica de Ruanda, en la diócesis de Kabgayi, y otros crímenes de guerra cometidos durante el genocidio de 1994, según ha declarado el portavoz de los militares ruandeses, el mayor Jill Rutaremara, en un comunicado de prensa.
Según este comunicado, los arrestados son el general Wilson Gumisiriza, el mayor Wilson Ukwishaka, el capitán John Butera y el capitán Dieudonné Rukeba, todos altos mandos en la segunda división de la provincia del sur, durante el derrocamiento del antiguo régimen, en 1994.
Esta decisión se ha tomado justo una semana después de que el Fiscal General de Ruanda, Martin Ngoga, asegurase al Consejo de Seguridad de la ONU que se acusaría a algunos oficiales del ejército por los crímenes cometidos durante el genocidio de 1994.
Tras las investigaciones realizadas entre las autoridades fiscales de Ruanda y la Oficina del Fiscal General del Tribunal Criminal Internacional para Ruanda, ICTR, sobre las sospechas y las circunstancias del asesinato de algunos miembros de la iglesia católica, el 5 de junio de 1994, en la iglesia de Kabgayi, las autoridades militares han ordenado y efectuado la detención de cuatro de sus oficiales, sospechosos de estar relacionados con el asesinato, para comparecer ante un tribunal militar.
El Tribunal de las Naciones Unidas para Ruanda y algunos críticos con el Gobierno de Ruanda, siempre han pedido la acusación y procesamiento de algunos oficiales del ejército del país, acusado de crímenes de guerra, durante el genocidio y la guerra de 1990 a 1994. Los cuatro arrestados están entre los principales acusados por el juez español.
El mismo Rutaremara explica más adelante que los soldados que mataron a clérigos, como al arzobispo de Kigali, Vincent Nsengiyumva, lo hicieron en un ataque de enfado y desesperación.
(African Press Agency, 12-06-08)