Es una noticia de primera mano: “La Iglesia congolesa toma postura sobre la explotación minera y la distribución de sus recursos. En un primer informe de 150 páginas, la Comisión episcopal para los recursos naturales, ha analizado el impacto de la explotación de la casiterita, este componente que sirve para la fabricación de teléfonos móviles, en la economía de Walikale en el este del Congo. Las conclusiones no son muy positivas.
El productor más grande del país de casiterita con una producción de 22 toneladas desde el 2008, la región de Walikale no está sin embargo más desarrollada que hace cinco años. Según la conclusión del informe episcopal sobre los recursos naturales y una encuesta que se ha realizado durante cinco meses, los 77 millones de dólares producidos por el mineral no han mejorado las condiciones de vida de los 10.000 “cavadores” y de sus familias.
Es cierto que la carretera que conduce a la ciudad de Walikale, a 250 kms. de Goma ha sido rehabilitada. Tres escuelas de enseñanza primaria y un hospital han sido construidas en estos últimos cinco años. Pero ninguna de sus infra estructuras ha sido financiada por la casiterita según informa la comisión. En su lugar, grupos armados se disputan el acceso a las minas y a su producción por lo que casi nada regresa a las arcas del Estado.
Empresas extranjeras que no se preocupan mucho
Según Henri Muhiya que ha dirigido el informe, el primer responsable de esta situación es el Estado congolés. “Si el territorio de Walikale está invadido por grupos armados y si el mineral es explotado en el desorden es porque el estado no ha hecho nada por asegurar su seguridad. Pero el Estado es a su vez controlado por otros actores, los que se aprovechan de los minerales que salen de Walikale”.
Entendiéndose por estos actores a empresas indias, belgas, ruandesas e inglesas que se preocupan muy poco por las condiciones en que se hace la extracción del mineral.
La comisión episcopal hace una llamada al Estado a cazar los grupos armados y restaurar su autoridad en el territorio. Conclusiones que ya tienen un aire de haberse “visto antes” pero en que la parte más difícil es ponerlas en práctica.
Allafrica
Traducido y editado para Fundación Sur