Un tribunal de la ONU ha sentenciado al ex presidente de Liberia, Charles Taylor a 50 años de cárcel, el día 30 de mayo, por armar a los rebeldes de Sierra Leona, a cambio de “diamantes de sangre”.
“El tribunal le condena por unanimidad a una condena única de 50 años en la cárcel por todos los cargos”, dijo el juez del Tribunal Especial para Sierra Leona, Richard Lussick, en el tribunal con sede en La Haya.
“El acusado ha sido encontrado responsable de ayudar a cometer y complicidad para cometer algunos de los más atroces crímenes de la historia de la humanidad”, continuó Lussick.
Taylor, de 64 años, vestido con un elegante traje oscuro, camisa blanca y corbata dorada, escuchó con los ojos cerrados y cara demacrada cómo el juez dictó la sentencia, que Taylor puede apelar.
El ex presidente de Liberia fue declarado culpable, el pasado 26 de abril, de los 11 cargos de crímenes de guerra y crímenes contra la humanidad, por ayudar y ser cómplice del Frente Revolucionario Unido, RUF, durante la guerra civil del país, entre 1991 y 2001.
A cambio, según el tribunal, Taylor recibía en pago diamantes extraídos por mano de obra esclava en zonas bajo control de los rebeldes que asesinaron, violaron y retuvieron a esclavas sexuales, además de mutilar cortando miembros del cuerpo y obligaron a niños de menos de 15 años a luchar en el frente.
(Daily Nation, Kenia, 30-05-12)