Según el Ministerio de Género, Trabajo y Asuntos Sociales de Uganda, 2.700.000 niños realizan trabajos peligrosos, en el país.
Uno de cada tres niños, de entre 5 y 17 años, es obligado a trabajar, o bien empujados por sus padres o bien debido a la pobreza en que viven, para intentar salir de ella. “El trabajo infantil es un fenómeno muy extendido en Uganda, donde aproximadamente 2.700.000 niños y niñas, de los 7.900.000 censados, están trabajando de manera prematura”, asegura la Ministra Syda Bbumba.
Los niños que son cabeza de familia se ven forzados a trabajar para mantener a sus hermanos. De los 950.000 huérfanos del SIDA, al menos 300.000 realizan alguna clase de trabajo peligroso, que a veces les expone a infectarse con VIH.
La Ministra ha remarcado que estos casi tres millones de niños que trabajan, no incluyen a los que realizan trabajos domésticos. “El trabajo doméstico sólo llega a ser un trabajo de peligrosidad cuando le niega al niño la educación y el desarrollo normal”, aclaró Bbumba.
El Gobierno está intentando eliminar el trabajo infantil a través de programas como la Educación Primaria Universal, la Erradicación de la Pobreza y un plan de Acción y Prosperidad para Todos.
La Ministra espera que la política de diálogo, saldrá con recomendaciones para la ayuda a huérfanos y llevará a importantes reformas del sector de la educación, para dejar a los niños en la escuela.
Gilbert Ssendugwa, de la Organización Mundial del Trabajo, ha declarado que en el estudio de 2006, se desvelaba que 165.000 niños ugandeses, nunca se habían apuntado a la escuela, y 495.000 que se habían apuntado, lo habían dejado ese mismo año.
(Angola Press, 11-06-08)