La esposa del ex presidente de Cabo Verde, Simone Gbagbo, ha sido declarada culpable de “participar en un movimiento insurreccional”. En los disturbios de 2010 y 2011 murieron 3.000 personas.
Dada la importancia del uso ilegal de armas en el país, el Gobierno de Cabo Verde aprobó la semana pasada una propuesta de resolución para ratificar el proyecto de Tratado sobre Comercio de Armas, aprobado por la Asamblea General de las Naciones Unidas en abril de 2013.
El portavoz del Consejo de Ministro ha señalado que la aprobación de este tratado “sirve para fortalecer la voluntad del país en el combate contra la proliferación de armas convencionales, ya que adopta un conjunto de medidas eficaces para detener este factor negativo y perjudicial para la seguridad del país”. Esta decisión, que permitirá a Cabo Verde unirse al cuerpo jurídico internacional, ha sido tomada en un momento en el que el país también ha aprobado una legislación sobre las armas.
El país será aliado así de la Unión Europea en cuanto al combate contra el comercio ilegal de armas, y se muestra comprometido con los valores del derecho internacional humanitario, la paz, la seguridad y la estabilidad internacional.
O País – Fundación Sur