La introducción de la educación fundamental en el sistema educativo de Burundi ha sido interpretada de diferentes maneras. Para los que defienden la reforma, los alumnos que no entran en la escuela secundaria se podrían calificar para la pequeños oficios: costura, carpintería, albañilería. Según ellos, esta reestructuración cuadra también con los requisitos de la Unesco y de los países donantes de ayuda al desarrollo que exigen encuadrar al niño según su edad. Para ellos es una oportunidad para ampliar el acceso a la educación a un mayor número de alumnos, de reducir la repetición de curso y de insertar a los que terminan sus estudios en la vida ordinaria siendo capaces de crear sus propios puestos de trabajo. Es también un paso más hacia la integración de Burundi en la Comunidad de África del Este.
Para aquellos que no están de acuerdo, el sistema fue introducido sin previa experimentación, los que lo que lo diseñaron y los supervisores no están capacitados, y los materiales de soporte pedagógico
no están redactados de acuerdo con las normas reconocidas, además de tener carencias.
Tres años más tarde de la implementación del plan educativo ya han salido los primeros que terminan con este sistema. Iwacu ha realizado una encuesta para darse cuenta de los preparativos para después de la escuela fundamental, a pocos días del comienzo del curso. Ciertamente, las autoridades están trabajando para ganar la apuesta, pero las dificultades se mantienen. Además de la inflación de los precios del material escolar, los centros de enseñanza de oficios, que deben admitir a los estudiantes que han suspendido la reválida, no disponen de material ni de programas, las aulas de postbásica no están todas preparadas y algunas direcciones provinciales carecen de personal cualificado… No importa. Según el Ministerio de Educación, los alumnos de noveno y decimo curso que han aprobado en clase pero que no pasaron la revalida para la secundaria se quedarán en casa esperando la siguiente prueba nacional. Según el sindicato CONAPES, alrededor de 80.000 alumnos se encuentran en esta categoría. Pregunta: ¿De qué manera serán supervisados estos adolescentes durante todo un año?
Y para retomar la pregunta del presidente de este sindicato: «¿Cómo puede un niño que no ha tenido éxito mientras estaba bajo la supervisión de profesores tener éxito después de un año fuera de las aulas?»
Leander Sikuyavuga
Iwacu
[Traducción, Jesús Esteibarlanda]
[Fundación Sur]
