Hakainde Hichilema, el presidente de Zambia, ha denunciado recientemente la existencia de presuntos golpistas que estarían planificando el fin del gobierno democrático, así como la ruptura de la estabilidad del país a través de la toma ilegal del poder.

Los comentarios del presidente, a modo de advertencia contra los golpistas, han llamado la atención a todo el continente y al resto del mundo. La existencia de un posible complot golpista ha pillado a todos desprevenidos. Los antecedentes de gobierno militar en Zambia, o de interferencia en los procesos políticos, son escasos, habiendo sido el último intento de golpe de Estado hace casi 30 años, el cual resultó fallido.

Ante la ausencia de precedentes golpistas muchas personas y organizaciones han tildado los comentarios de Hichilema de irresponsables a la vez que incendiarios, considerándose que las declaraciones del presidente son un intento deliberado de minar las instituciones democráticas del país.

El discurso que ha desarrollado Hichilema tiene dos principales audiencias; por una parte al sector militar del país, y por otra se dirige a los gobiernos occidentales con el fin de poder generar una mayor represión hacia la oposición en vistas a las elecciones del año 2026.

Autor: Sishuwa Sishuwa

Fuente: African Arguments – Imagen: Wikimedia Commons

[Traducción y Edición, Yara Fernández]

[CIDAF-UCM]