Ante el anuncio del gobierno francés de una revaluación de los acuerdos de 1968, el ejecutivo argelino ha rechazado lao que considera “los ultimátums y amenazas” y señalado que cualquier modificación condicionaría en la misma manera los protocolos franco-argelinos vigentes.
Los acuerdos de 1968 confieren a los ciudadanos argelinos una excepcionalidad en términos de residencia, circulación o empleo en territorio francés.
Fuente: Africa Radio
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