Una conferencia ha reunido el pasado 14 de Noviembre una veintena de países en Rabat la capital de Marruecos para tratar de crear una cooperación de fronteras.
El Objetivo: luchar contra la inseguridad y la criminalidad en el Sahel. Estos últimos meses los secuestros de cooperantes occidentales y las tragedias de la Emigración clandestina están llenando las páginas de la prensa. Los tráficos de todo género prosperan en la región. No podemos olvidar que el 31 de Octubre pasado 92 emigrantes entre los cuales había muchas mujeres y niños fueron encontrados muertos en el desierto de Nigeria en la ruta de Argelia, lo cual es una prueba de un comercio de emigración que se recrudece. El reciente doble asesinato de periodistas franceses en Kidal en Mali que reivindica Al-Qaïda en el Magreb islámico (AQMI) ha mostrado que la operación Serval lanzada a principios del 2013 está muy lejos de haber resuelto el problema del terrorismo en esa región.
Entre los participantes a la reunión de Rabat figuraban los países del Magreb, con la excepción notable de Argelia, en que el ministro de Asuntos Extranjeros no juzgo útil desplazarse allí. Una ausencia que se debe a las malas relaciones que tienen Argelia y Marruecos. Una situación penosa porque solo un acuerdo regional puede ser la solución posible para intentar mejorar la situación del Sahel.
De un comunicado de Radio Vaticano
Traducido y editado para Fundación Sur