Ángel Olaran atrae a las personas de buena voluntad. En los últimos años he entrevistado a bastantes que querían conocerle y sin demora partían hacia las montañas de Etiopia a echarle una mano. Algunos incluso llegaron en bicicleta. Este misionero nacido en Hernani en 1938 se ha creado, sin quererlo, una leyenda de hombre bueno. Llego a Etiopia en 1992 procedente de Tanzania. Aprendió diversos idiomas locales y a finales de 1993 se instalo en Wukro en la región del Tigray. Un pueblo en donde solo había un árbol y mucha maleza. Aquel primer árbol se ha multiplicado por 12 mil y han brotado escuelas, talleres profesionales e incluso una escuela de circo.
Ángel Olaran nos visito en La Casa de la Palabra (22/10/2010). Le había entrevistado en varias ocasiones en directo donde nos hablaba son su voz suave y tranquila desde la misión de Wukro. Con alegría nos contaba los proyectos que llevaba en marcha y nos describía con gran cariño las noches en las montañas etíopes. Ahora le podía estrechar las manos y escucharle frente a frente.
Y hablo de las injusticias que padece un continente olvidado y marginado como el africano. Nos mostró el sentimiento y los valores de sus gentes.
Ángel Olaran es misionero de los Padres Blancos de África. Estuvo durante 20 años en Tanzania y desde hace18 años esta instalado en Etiopia. En 1993 llego a Wukro, un valle situado a más de dos mil metros de altura, desde donde se alzan altas montañas.
El Tigray es una región de una cultura propia y milenaria. Con su propio idioma, una mezcla de árabe y hebreo. Los rasgos físicos son muy característicos sin paralelismo con el resto del África negra.
Ángel Olaran ha logrado un proyecto integral en Wukro. Junto a las actividades asistenciales realiza otras medioambientales y económicas (vaquería, lechería, reforestación). El colegio Saint Mary ofrece educación profesional a cerca de 400 alumnos en agricultura, comercio, electricidad, soldadura, mecánica general y fontanería. Además existe un centro social en donde los jóvenes practican la pintura, escultura en barro, trabajo en cuero, corte y confección, karate y circo.
Wukro es una zona semiárida y sin embargo han conseguido plantar múltiples frutales. La escuela de agricultura es toda una referencia en la zona.
Ángel quiere convertir los alrededores de Wukro en un gran bosque. Su mayor enemigo son las cabras que se comen los brotes de los árboles. Para ello se necesita contratar a un grupo de guardabosques que vigilen desde las colinas.
