Arrestos arbitrarios, torturas, desapariciones, ejecuciones: de esto acusa la organización Amnistía Internacional al gobierno de Angola en su último informe, en el que enumera violaciones denunciadas desde el 2011.
Las víctimas de abuso de las “fuerzas de seguridad” son “todos los que se oponen al régimen angoleño”, reza el documento de los especialistas de Amnistía, los cuales le piden al gobierno del presidente Eduardo Dos Santos que termine con estas prácticas y lleve a los responsables ante la justicia.
La organización internacional volvió a recordar el caso de los activistas Silva Alves Kamulingue e Isaías Sebastiao Cassule que desaparecieron en mayo de 2012, mientras organizaban una manifestación. A pesar de que recientemente Angola firmó la Convención Internacional contra las Desapariciones Forzadas y de que se le negó una promoción a un oficial de alto rango sospechoso de estar involucrado en los hechos, no hubo más noticias de ninguno de los dos activistas.
Amnistía también recordó el asesinato del opositor Manuel de Carvalho “Ganga”, miembro del partido opositor Casa-Ce, quien fue asesinado por un miembro de la unidad de seguridad presidencial luego de haber sido arrestado por pegar carteles electorales cerca del palacio presidencial.
Por su parte, el gobierno angoleño, a través de Joao Pinto, uno de los líderes del partido gobernante, dijo que Angola “no se someterá” a Amnistía Internacional y afirmó que la ONU dio una “opinión positiva” del gobierno en el último informe sobre el tema.
Fuente MISNA Fundación Sur
