Con la firma de un acuerdo en Bangui, los grupos armados rivales de la excoalición rebelde Seleka y las milicias de autodefensa Anti-Balaka aceptado un principio de mediación para hallar una solución negociada a la crisis centroafricana.
Las dos partes designaron como mediador al guineano Béni Diogo Kouyaté, vicecoordinador de la ONG centroafricana Paz-Reconciliación-Tolerancia (Pareto), que en las últimas semanas ha sido el artífice de las conversaciones de alto nivel entre los líderes de los grupos
Según informó la emisora local Radio Ndeke Luka, el acuerdo fue firmado por Eric Massi, exportavoz de Seleka, y Patrice Edouard Ngaissona, representante de los Anti-Balaka, los cuales también decidieron formar un comité conjunto de reflexión en poco tiempo.
“Los dos grupos han traído un mensaje al pueblo centroafricano, que sufre por los crímenes cometidos. Lo importante es que cada parte reconozca sus responsabilidades y tenga la voluntad de ir hacia el diálogo, pero también – y sobre todo – que pida perdón”, dijo Kouyaté.
Desde el golpe Estado de Seleka en marzo de 2013, la República Centroafricana ha sido escenario de una crisis armada, política, económica y humanitaria. Los ex rebeldes Seleka están en una posición dominante en su región de origen en el centro-norte, y establecieron su cuartel de operaciones en Bambari. En cambio, en el sur del país se establecieron las milicias de autodefensa y exsoldados leales al presidente derrocado François Bozizé.
Fuente MISNA Fundación Sur