Sudáfrica ha presenciado, durante las últimas dos décadas, una marcada emigración de sus ciudadanos hacia otros países en busca de nuevas oportunidades. Sin embargo, solo una fracción de este número ha optado por regresar a casa. Según revela el Informe de Perfil de Migración, publicado por Stats SA, los datos recopilados desde el año 2000 muestran que alrededor de 413.000 sudafricanos han emigrado a diversas partes del mundo, mientras que en 2022, menos de 28.000 han regresado a Sudáfrica.
Esta tendencia ha planteado preocupaciones sobre la llamada «fuga de cerebros», ya que a menudo son los ciudadanos más calificados y económicamente prósperos quienes optan por establecerse en el extranjero. Los destinos más comunes para los emigrantes sudafricanos incluyen el Reino Unido, Australia, Estados Unidos, Nueva Zelanda y Canadá, donde muchos buscan mejores oportunidades laborales y un mayor nivel de vida. Además, un número creciente de sudafricanos ha optado por solicitar asilo en el extranjero, con los Estados Unidos siendo uno de los destinos principales para aquellos que buscan refugio.
A pesar de la narrativa emergente que sugiere que los sudafricanos están regresando a su país de origen atraídos por el menor costo de vida y otros factores, los datos de Stats SA no respaldan esta idea, ya que, según los censos, el número de sudafricanos que regresan a su país no muestra un aumento significativo, lo que indica que la emigración continúa superando a la inmigración. A pesar de desmentir esta narrativa, Stats SA sí ha señalado que Sudáfrica sigue siendo un beneficiario neto de la migración de habilidades, con un aumento notable en la inmigración de ciudadanos africanos que aportan valiosas habilidades al mercado laboral.
Fuente: Business Tech
[Traducción y edición, Bruno Rodríguez]
[CIDAF-UCM]