Después de dos años sin poder reunirse los cristianos de Uganda en Namugongo para celebrar la fiesta anual más importante del país, el 3 de junio de este año de 2023 ofrece la ocasión para el encuentro de casi dos millones de peregrinos venidos de todos los pueblos de Uganda y de África oriental. Esta es la mayor aglomeración anual de peregrinos de toda África del Este.
Habiendo vivido esta celebración de los Mártires de Uganda durante 40 años, deseo resaltar el ambiente festivo, alegre, de oración y de unidad de todas las tribus y sociedades de África oriental durante estos días de celebración.
Nos sorprenden muchos aspectos de esta fiesta: la preparación detallada para acoger y cuidar a los peregrinos, la celebración festiva de la fe en una liturgia celebrada con alegría, vibrante, solemne y que emociona a la inmensa mayoría, pues todos participan cantando, bailando y escuchando las lecturas proclamadas. El ambiente es emocionante, gozoso y conmovedor por la acogida mutua, la fiesta de fe y por la variedad inmensa de todos pueblos y razas reunidos y celebrando la Vida juntos.
Los peregrinos llegan de muchas maneras, pero la inmensa mayoría llega en grupos que caminan durante días y semanas desde todas las partes del país y de las naciones vecinos.
Este año son los peregrinos de la diócesis católica de Jinja los encargados de acoger, alimentar y animar la celebración de la mejor representación africana del año. La acogida de los peregrinos está muy bien organizada tras muchos años de experiencia y hospitalidad sorprendente. Las aulas de las escuelas de la zona se abren para albergar a los peregrinos. Los servicios de salud, orden y alimentación están bien organizados. La comida es sencilla pero abundante: incluye puré de bananas, mijo, arroz, posho (maíz), calabazas, frijoles, etc. y fruta en grandes cantidades.
El agua potable está disponible para todos, como bebida y para su aseo. La cerveza de plátano y de maíz suele ser abundante también, como en todas las fiestas.
Impresiona que, a pesar de la multitud inmensa de gente reunida, todo se vive en un ambiente extraordinario de armonía, gran alegría por el encuentro, participación de todos en ayudarse según las necesidades.
Algunas personas encuentran más laborioso el viaje de vuelta a su región de origen, y deben esperar su turno.
Si alguien desea vivir una fiesta multitudinaria, al mejor estilo ugandés y africano, yo le recomendaría en primer lugar: la celebración anual de los Mártires de Uganda, cada 3 de junio, en Namugongo, a 8 km. de Kampala.
Lázaro Bustince
[CIDAF-UCM]